Un control rutinario de la Guardia Civil está provocando esta mañana retenciones en la AP-9 entre Pontevedra y Vigo. Uno de los carriles está siendo ocupado para dar el alto a los vehículos, lo que está perjudicando a la fluidez de la circulación. Gran cantidad de vehículos, tanto turismos como camiones, estaban parados en el margen de la vía.

Una fuente oficial de la Guardia Civil explicó que se trata de un control rutinario, en los que se suele revisar minuciosamente si los vehículos llevan armas, explosivos u otras sustancias prohibidas. Son revisiones detalladas que requieren de tiempo, de ahí que la circulación pueda verse afectada. En todo caso, esta fuente aclaró que no se trata de un operativo especial por un caso en concreto.