Una celebración que arrancó ayer "pero no sabemos cuando acabará". Así empezaban muchas de las noches en las que el periodista de FARO, Fernando Franco se ponía a Vigo por montera acercando a los grupos más sonados y también a los que estaban por descubrir los secretos de la noche de los 80. Y como las tradiciones no pueden romperse, los organizadores de su particular homenaje musical abrirán las puertas de El Ensanche a la hora señalada pero no sabemos cuándo se cerrarán.

El recorrido profesional de Fernando Franco llega a su fin pero no el cariño y la admiración de todos aquellos rostros más representativos de la aclamada Movida viguesa ni tampoco los más recientes, quienes no dudan aplaudir el altruismo y disposición de Franco. "A la mínima llamada que le hacías él te atendía y ayudaba, si esto no es para homenajearlo ya me dirás", reconocía Piño Prego, uno de los precursores del "sarao" de ayer en el centro vigués.

Reconocen que no se trata e un homenaje al uso, ni de una fiesta por su jubilación, sino un brindis por su dedicación, un "chin-chin" por el fin de su recorrido profesional. Y eso que él no estaba mucho por la labor. "Fernando Franco es una persona tímida, lo tuvimos que convencer para esta fiesta. Los precursores fuimos íntegramente nosotros y al final él tuvo que ponerse en contacto con la gente; recordar viejos tiempos y aunque no quiera, hacerle un homenaje. Y es que siempre hemos podido llamarlo para cualquier evento y no solo nosotros, también cualquiera de otras épocas y siempre siempre ha estado ahí", reconocía Prego.

¿Y qué fue lo que se encontraron anoche los asistentes a El Ensanche? Una fiesta que trajo al presente un espacio común que compartió mucha gente especialmente relacionada con el mundo del arte y la música. A las once se abrieron las puertas para dar a luz a una cena más íntima que reunió a músicos como Teo Cardalda, Alberto Comesaña o Tony Lomba, a la Banda de Nash o al grupo Gallo Rojo, compuesto para la ocasión por Silvino "Aerolíneas", Luis "Golpes Bajos" y Javi "Semen Up", a Nuria Cora y a la cantante y violinista Patricia Moon. Unos más de los 80 que otros, más tardíos, pero todos unidos por Vigo y por la música. A última hora se sumó incluso Mon [Cancela], exlíder de Lombardi.

A continuación las puertas se abrieron para todos aquellos que han querido rendir su particular homenaje al ya concebido como el cronista de la Movida viguesa.

La Banda de Nash fue el grupo estable de una noche en la que cada uno de los músicos también tocaron dos o tres temas. La diversión, el pasárselo bien pero sobretodo una muestra de agradecimiento colectivo fueron los tres pilares que dieron pie a esta homenaje, "el primero de seguro mucho", asegura Piño Prego.