Una buena forma de hacerse una idea de la elevada carga de trabajo que asumen los juzgados de Vigo son las estadísticas de la oficina de registro y reparto de demandas. Aunque algunos expedientes se presentan aún en papel, la mayoría llegan a través del sistema telemático Lexnet. Los funcionarios del servicio vuelcan los archivos en el programa informático judicial Minerva, los registran y el sistema ya los reparte al tribunal que corresponda. ¿Y qué cifras se manejan en esta oficina? Pues solo en lo relativo a asuntos nuevos entre el 1 de enero y este 4 de abril hubo 11.975, de los cuales más de 1.300, todos ellos demandas civiles, están pendientes de ser registrados y elevados a sus salas debido a la huelga de funcionarios. Pero en este servicio también se reciben los escritos de trámite, es decir, aquellos que se formulan en el marco de una causa ya judicializada. Aquí las cifras se disparan: en ese mismo período de poco más de tres meses hubo 26.084. Y a esto hay que añadir los exhortos, las peticiones de auxilio judicial que hacen otros juzgados de Galicia o de otros puntos de España: entraron 451. En total, entre nuevos casos, escritos de trámite y exhortos, la oficina registró la friolera de más de 38.500 expedientes. ¿Y en todo un año? Pues en 2017, por ejemplo, se contabilizaron y repartieron más de 200.000.

Estos datos estadísticos fueron algunos de los aportados al Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), que ayer realizó una inspección rutinaria en el servicio, que reparte escritos a todos los juzgados vigueses con la excepción del Mercantil: Primera Instancia, Instrucción, Social, Contencioso-Administrativo, Penal y Violencia sobre la Mujer. Junto a la secretaria de Gobierno del Alto Tribunal gallego, Concepción Otero, a Vigo también acudió el secretario coordinador de la provincia de Pontevedra, José Tronchoni. De forma previa a esta visita, desde los juzgados vigueses ya se habían facilitado la mayoría de datos requeridos. Junto a los escritos de todo tipo registrados y repartidos, otras cuestiones por las que se se pidió información fueron relativas a la plantilla de la oficina, la organización del trabajo en la misma, sus instalaciones y medios materiales, los órganos judiciales a los que presta servicio o los medios informáticos.

A la espera del informe que elabore el TSXG, fuentes judiciales de Vigo señalaron que la visita discurrió de forma positiva, incidiendo en que la inspección comprobó "que se cumple el reglamento" del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) relativo a servicios comunes como éste de la urbe olívica. ¿Y se elevó alguna petición de mejora con respecto al mismo? Uno de los problemas de la oficina de reparto es la escasez de espacio, si bien esta cuestión se resolverá una vez los tribunales se trasladen a la nueva Ciudad de la Justicia. Y una solicitud realizada es que la oficina cuente con un letrado de la Administración de Justicia (secretario judicial) propio, como ocurre en el Servicio Común de Notificaciones y Embargos. La sugerencia fue planteada por la persona que desde 2010 tiene encomendada la dirección de este servicio de reparto, que además es letrada judicial del Juzgado de lo Social número 2 y secretaria del decanato. Que la oficina tenga un letrado en exclusividad, considera, le permitiría funcionar con más autonomía y asumir más funciones.