Las grandes dimensiones de sus espacios, la cantidad de gente, la saturación de luces y ruidos, la rigidez del sistema... Son algunos de los obstáculos con las que se topan las personas con trastornos del espectro autista en el ámbito sanitario y que contribuyen a acrecentar las dificultades de comunicación, comprensión y adaptación al entorno que padecen. La Federación de Autismo de Galicia -con unas 400 familias asociadas en Vigo- está empeñada en romper unas barreras a las que se enfrentan una de cada cien personas -una prevalencia que se está incrementando- y, junto al Sergas en Vigo han iniciado un programa para derribarlas. Y una de las principales herramientas son los pictogramas. Ayer, en el Día Mundial del Autismo, dieron a conocer estas medidas.

Este sistema alternativo de comunicación -más accesible para personas con problemas cognitivos- ya se utiliza para señalizar salas en el área de Pediatría y de Urgencias del Álvaro Cunqueiro. Ahora se llevará también a centros de salud.

Estos símbolos también se emplearán para preparar a los pacientes para ciertos procesos, como extracciones. Son una prueba habitual y que causa rechazo entre estas personas, al ser invasiva por el pinchazo. Anticiparles mediante una secuencia de imágenes los espacios en los que van a estar y lo que va a suceder les confiere tranquilidad y ayuda a evitar los problemas de conducta que suelen surgir en entornos ruidosos o con mucha gente. Empezarán por estas analíticas, pero prevén continuar. En el área de A Coruña también las tienen para electrocardiogramas y visitas al odontólogo.

Esta secuencia se facilitará en las consultas y se colgará en la web de la federación. Esperan que en un futuro esté en la plataforma e-Saúde. También han propuesto que se haga a través de aplicaciones móviles para que se pueda nutrir de las fotos de usuarios y mantenerse actualizado.

Dentro de este programa, se ofrecerán "píldoras de formación" a los sanitarios de centros de salud para flexibilizar y adaptar la atención a las necesidades específicas de este colectivo. Santiago, que inició estas medidas hace 3 años, dispone de profesionales de referencia en algunas especialidades, como Ginecología, según explicó Teresa García, encargada de salud en Autismo Galicia. Una de las medidas que funciona en el Sergas desde 2012 es la tarjeta doble A, con la que no tienen que aguardar en salas de espera.