El tráfico ferroviario entre Vigo y Ourense quedó restablecido en la madrugada del martes al miércoles tras solucionar Adif una deformación de la vía entre Arbo y Frieira motivada por el temporal que azotó a la región, como avanzó FARO. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias cumplió con los plazos ofrecidos inicialmente y solventó la incidencia en diez días, evitando el perjuicio de miles de viajeros en el inicio de la Semana Santa.

El restablecimiento del servicio se efectuó con limitaciones de velocidad a 30 km/h en dos puntos kilométricos, donde se van a seguir realizando trabajos de mejora de la infraestructura, pero ya compatibles con la circulación ferroviaria. En total estaban afectados dieciséis trenes diarios que unían la ciudad olívica con Barcelona, Madrid, Bilbao, León o Ponferrada y que tenían una capacidad de 1.200 personas.