Marcar el número, preguntar por el piso que acabas de ver en el ordenador y encontrarte con que ya está alquilado. La conversación se repite cada día. Decenas de propiedades viguesas se suben semanalmente a los dos portales inmobiliarios líderes en internet, Idealista y Fotocasa, para ser arrenadados. En la mayoría de ocasiones, los apartamentos apenas están disponibles durante más de 48 horas.

Un ejemplo en la calle Mora: la inmobiliaria de un estudio, por el que se pagan 350 euros al mes, reconoce haber recibido al menos 18 llamadas de interesados por el piso en un solo día. El debate sobre la burbuja del alquiler no es ajeno a Vigo, que se sitúa como la ciudad gallega con los precios más altos, según los datos facilitados por el portal Fotocasa.

En Idealista, el precio por metro cuadrado en Vigo es de un euro más. La evolución respecto a 2011 es superior al 11%, un incremento que parece aún mayor si se tiene en cuenta la caída de precios experimentada a mediados de la pasada década.

El panorama invita a muchos propietarios a elevar el coste de los arrendamientos. Una casa en la zona de Coruxo se alquila a 1.200 euros, con cinco habitaciones y amueblada. Todavía está disponible y sus propietarios mantienen el mismo precio que habían establecido cuatro años atrás al anterior inquilino. "Otros sí lo suben. Ven como está el mercado en su zona e incrementan los precios", explica la inmobiliaria que gestiona el solar.

Entre las capitales gallegas, solo Lugo parece mantenerse al margen del alza en los precios. Pontevedra, Ourense y A Coruña han incrementado el precio del metro cuadrado en al menos 1 euro desde 2013, según Idealista. Esta última compite con Vigo cada trimestre por ser el alquiler más caro entre las ciudades de la comunidad.