"La semana que viene seguiremos, sin duda; no podemos perder lo que llevamos luchado estos días". Un grupo de funcionarias viguesas coincidía en esta afirmación. El paro tiene un coste económico para estos trabajadores, de entre 60 y 80 euros diarios, pero ayer insistían en que continuarán la lucha, que no darán "un paso atrás". Y sobre la protesta ante la sala de bodas, Pablo Valeiras, de Alternativas na Xustiza-CUT, señaló que "respetan" los enlaces. "Solo fuimos allí para acompañarlos y cantarles 'viva los novios", decía.

Los funcionarios de Vigo inundaron ayer la sala donde los sindicatos dieron la rueda de prensa. La unidad ante unas reivindicaciones que, insisten, son "justas" sigue tan viva como el primer día de conflicto. "Entendemos la problemática que [esta huelga] causa a la ciudadanía, somos un servicio público; pero la responsabilidad es del gobierno de la Xunta, que va a provocar un atasco brutal en los juzgados", afirmaba Julio Bouza, de SPJ-USO, en una comparecencia en la que acusaron al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, de "mentir"en relación con las cantidades por las que están luchando en relación con el complemento autonómico transitorio. "No pedimos esa barbaridad que dice", señaló, concretando que lo que se reclama para los 2.500 funcionarios gallegos de Justicia supone 6 millones y medio de euros en un plazo de tres años frente a lo que dice la Xunta. "Hablan de 600 millones de euros, no se de donde sacan esas cifras", matizó.

Como ocurrió en más comparecencias en otros puntos de Galicia, los sindicatos de Vigo "convocan" a Feijóo o al vicepresidente Alfonso Rueda este lunes a una reunión en Santiago. "Queremos negociar", dijeron. También proponen al presidente de la Xunta "un debate público" en la TVG, "o donde quiera". El comité de huelga cifró el seguimiento ayer en Vigo en un 95%, como en días anteriores. La Xunta rebaja la cifra en la provincia de Pontevedra al 38,73%.