El Sergas hace hoy balance de la actividad en su red de hospitales al cierre de 2017. La espera media para operarse en el Complejo Universitario de Vigo se recorta casi seis días hasta los 88,6 con respecto al 31 de diciembre de 2016. Así se sitúa por debajo de los tres meses por primera vez desde 2012 -cuando operaba en 69,3 jornadas-, pero sigue siendo la demora más alta de Galicia, cuyo promedio -66,4 días -supera en más de tres semanas.
A través de un comunicado, la Gerencia del área sanitaria viguesa destaca que se alcanzó una cifra “histórica” de cirugías superando la barrera de las 36.000 intervenciones. El crecimiento anual fue del 3,5%.
Lo que empeora es la respuesta a los casos más graves (prioridad 1), que sube tres días hasta los 24,3 de media y son 6,2 más que en la media gallega. De todos modos, se mantiene dentro del compromiso de la Consellería de Sanidade de intervenirlos en menos de 30 días.
La Gerencia también subraya que se redujo en un 42% el número de pacientes con más de medio año esperando por una operación y que el plan de choque logró reducir en 18 días la demora media para entrar en un quirófano de Traumatología, aunque esta se mantiene en cuatro meses.
En la demora para una primera consulta con el especialista también se registra avances, al rebajarla en 5,5 jornadas hasta las 53,6.
