Una reclamación unánime de empresarios, partidos, instituciones y vecinos que supondría una parte ínfima del presupuesto de Fomento. Según la estimación facilitada por el propio presidente de la Xunta, acabar con el canon de la AP-9 entre Vigo y Redondela tendría un coste de menos de dos millones de euros anuales. El año pasado el departamento que dirige Íñigo de la Serna dispuso de más de 8.900 millones para invertir en infraestructuras. A pesar de ese dato, el titular de Fomento ya ha aclarado que no valora asumir el coste del gravamen. Durante una visita reciente a Santiago reconoció que el único escenario que valora el Gobierno para bonificar o suprimir la tasa es repercutir la reducción en las tarifas de la AP-9. Quedaría descartada la solución adoptada para el peaje en la sombra de Rande, que costearon en su día Xunta y Fomento y que en la actualidad afronta el ministerio en solitario.

Desde hace meses Feijóo pone en valor que la decisión de Fomento de asumir el 100% del coste del peaje de O Morrazo y A Barcala permitirá a las arcas autonómicas ahorrar casi siete millones de euros anuales. Según los cálculos de la Xunta, hasta 2048 eso supondría dejar de desembolsar aportaciones por un total de 400 millones.

A pesar de ese ahorro, Feijóo ya ha descartado destinar parte del dinero al peaje de Redondela. "Si el Gobierno de España aceptara la transferencia de la Autopista del Atlántico estaríamos hablando de otra cosa", anotó entonces el presidente.