Pontevedra y Ponte Caldelas se movilizan contra el bombeo de agua del río Verdugo al suministro de Eiras para abastecer de agua a Vigo y municipios de la comarca. Los gobiernos de ambos consistorios han anunciado ya medidas para intentar paralizar ese proyecto, acordado por Augas de Galicia, Vigo y los consistorios a los que beneficiará. La obra tiene un coste previsto de 5,5 millones, de los que el Concello aportará el 80%.

El gobierno local de Pontevedra mostró ayer su oposición al trasvase por falta de "informes serios" y aseguró que la medida afectaría al banco marisquero del fondo de la ría, de forma especial a los pescadores de anguila de Pontesampaio y Arcade.

"No se ha hecho un estudio de impacto ambiental, ni existe proyecto", criticó ayer el concejal responsable del ciclo del agua de la urbe del Lérez, González Carballo. Representantes del Concello de Pontevedra asistirán a la manifestación contra el trasvase que se celebrará hoy en Soutomaior.

Una postura similar mantiene el primer edil de Ponte Caldeas, Andrés Díaz, quien aseguró ayer que acudirá a los tribunales para frenar el trasvase previsto por Augas de Galicia en el Verdugo. Según apuntó Díaz, el gobierno autonómico está "obligado" a aprobar el proyecto de trasvase y someterlo a exposición pública, un proceso que abre las puertas a las alegaciones. En caso de que no se acepten, Ponte Caldeas presentaría un recurso contencioso. También echará mano de la misma vía si se tramita con urgencia y ya prepara una movilización.