Un aluvión de gente. Eso es lo que se pudo ver esta tarde y tarde-noche en las principales calles del centro de Vigo. A eso de las 20:30, la calle Príncipe mostraba un aspecto más propio de la madrileña Preciados, o de algún bulevar de una megalópolis.

La ambientación navideña programada por el Concello parece estar cosechando un éxito absoluto, y no solo en la apoteósica inauguración. De hecho, en previsión, decidió cortar algunas calles del centro al tráfico. Eso no evitó que se produjesen tapones en vías próximas.

También el belén gigante instalado en la Casa das Artes cosechó un gran éxito esta tarde, con colas de familias para entrar a ver el gran nacimiento montado a lo largo de los últimos tres años.