El gobierno local ha aprobado el proyecto de transformación del Parque Camilo José Cela que arrancará con la construcción de un ascensor panorámico para remontar cómodamente los 16 metros de desnivel entre Torrecedeira y Pi y Margall. La actuación busca que las familias vuelvan a ocupar uno de los escasos parques urbanos de Vigo y para ello plantea suprimir barreras arquitectónicas, crear un espacio mucho más diáfano y eliminar las actuales pérgolas de la parte superior para crear una nueva plaza que será ocupada por un parque infantil con un espectacular juego de escalada. "Es una de las grandes transformaciones pendientes en Vigo", subrayó ayer el alcalde, Abel Caballero, tras anunciar los 2,8 millones de euros que se invertirán en este céntrico enclave.

Al elevador acristalado se destinará alrededor de un millón de euros que se incorporan al proyecto Vigo Vertical financiado con fondos europeos de desarrollo sostenible. El resto de la partida permitirá renovar el pavimento y redistribuir los espacios del recinto resolviendo la pendiente actual con una grada-mirador hacia la Ría. Se eliminará el muro desde la calle Pi y Margall para evitar la sensación de parque cerrado y se suprimirán algunos árboles para iluminar este inmenso espacio.

"El modelo actual incita a la marginalidad y hay que cambiarlo por completo", argumentó ayer el regidor al exponer las líneas básicas de una reforma que habilitará una gran plaza de 900 m2 en el espacio que ahora ocupan los estanques y las pérgolas, redefinirá los senderos interiores y reforzará la seguridad instalando cámaras en las inmediaciones del ascensor.

Rodeado de colegios y en una zona con mucha población, el Concello quiere convertir el Parque Cela en un punto de encuentro ofreciendo una alternativa de ocio a los más jóvenes con juegos infantiles y una instalación para escalar pionera en la ciudad que combina la escalada con columpios y medirá alrededor de 20 metros de largo por nueve de ancho.

La renovación estética irá acompañada de una mejora de las acometidas con nueva iluminación, la ejecución de un colector de pluviales para conectar las redes de Pi y Margall y Torrecedeira, un nuevo sistema de drenaje, otro colector de saneamiento, redes de riego y mobiliario urbano moderno que inviten a usar más el recinto.

En la misma Junta de Gobierno se aprobó la humanización de García Lorca, licitada por 1,5 millones de euros y la primera fase de Purificación Saavedra al no poder cortarse todo el vial.