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Un sector clave para la comarca

PSA Vigo creará 600 empleos en un turno de fin de semana para las nuevas furgonetas

El equipo permitirá la contratación de unos 600 trabajadores a finales del próximo año - La planta fabricará la gama completa de los Berlingo, Partner y Combo, mientras que Mangualde hará las versiones más básicas

El K9 llevará a Balaídos a máximos de actividad. La próxima generación de vehículos comerciales ligeros (furgonetas) de PSA y Opel (proyecto K9), cuya producción en serie arrancará a mediados del próximo año, obligará a la factoría viguesa a poner en marcha un cuarto turno de fin de semana -que trabajaría solo sábados, domingos y festivos- a finales de 2018 para hacer frente a la demanda prevista de estos nuevos vehículos (cuatro modelos para las marcas Peugeot, Citroën, Opel y Vauxhall, como adelantó este periódico). Este equipo de refuerzo permitirá la contratación, según estimaciones de los sindicatos, de unos 600 trabajadores.

La dirección de PSA-Vigo informó ayer a una versión reducida del comité de empresa de la situación actual del lanzamiento del K9, cuyas preseries (montajes en línea de forma regular) comenzarán el próximo mes de noviembre. La planta estima que hasta marzo se fabricarán 900 unidades de estos nuevos modelos, de los que se espera una producción de más de 2 millones de unidades en los próximos diez años. Será en el segundo trimestre de 2018 cuando se produzca el trasvase de trabajadores de la línea 1 (donde se ensamblan las actuales furgonetas Berlingo y Partner) al Sistema 2, donde se producirán las nuevas K9 y los monovolúmenes Citroën C4 Picasso. Ambos modelos, K9 y C4 Picasso, compartirán espacio en línea al menos hasta el año 2020.

También durante ese trimestre se reactivará el turno de noche del Sistema 2, que se había suspendido en 2009 por el derrumbe de las ventas de monovolúmenes en plena recesión (lo que entonces provocó la pérdida de unos 900 empleos en PSA-Vigo), y se anulará el del Sistema 1 (los trabajadores pasarán de una línea a otra), que operará solo a dos turnos con los sedanes 301 y C-Elysée. El lanzamiento comercial (producción en serie) de las nuevas furgonetas se producirá a mediados de 2018, con una cadencia de 55 coches por hora.

Las K9 y los actuales Berlingo y Partner apenas coincidirán en el tiempo, pese al repunte de ventas registrado por estos últimos este año (batirán su récord histórico de producción), por estrategia comercial. Las previsiones para los nuevos modelos, que en las encuestas realizadas por PSA han sacado una excelente nota en cuanto a aceptación de mercado, son halagüeñas, por lo que la fábrica viguesa ya ha proyectado la puesta en marcha de un turno específico de fin de semana que estaría integrado por unos 600 efectivos, según cálculos de los sindicatos. Se trata de una de las medidas que PSA-Vigo y los representantes de los trabajadores ya habían negociado en el último acuerdo de flexibilidad. A estos 600 trabajadores habría que sumarle al menos otro millar que se crearía en las industrias de componentes y las auxiliares por "efecto arrastre".

Características

PSA guarda con celo los detalles sobre la imagen y características de estos nuevos modelos, con los que Balaídos se estrena en las marcas Opel y Vauxhall (para el modelo Combo). Lo que sí ha trascendido es que PSA-Vigo fabricará la gama completa de estos vehículos, con todas las versiones (la oferta de las furgonetas será cada vez más personalizada), mientras que el centro portugués de Mangualde, que comparte el lanzamiento con Vigo, hará las más básicas. La planta lusa también empezará a producir estas furgonetas más tarde que Balaídos; en concreto, doce semanas después. El K9, como ha ocurrido con los furgones Jumpy/Expert/Proace (K-zéro), también estará disponible en varias longitudes, como ya avanzó este periódico.

Esta semana se montó el primer Opel de la historia del centro vigués

  • La planta de PSA en Balaídos asistió el pasado martes al montaje en cadena del primer Opel de la historia de la factoría viguesa: un Combo. Hasta hace unas semanas, el montaje de las primeras unidades de la nueva generación de vehículos comerciales ligeros (cuatro modelos de las marcas Peugeot, Citroën, Opel-Vauxhall) se realizaba exclusivamente y bajo estrictas medidas de seguridad -para evitar posibles filtraciones a la competencia- en el taller conocido como búnker, pero ahora han dado el salto al taller de montaje en fase de pruebas, como avanzó FARO en exclusiva. La primera furgoneta en la línea de producción del Sistema 2, en el que también se ensamblan los monovolúmenes Citroën C4 y Grand C4 Picasso (proyecto B78), se montó ya a finales de julio, y tras la vuelta de las vacaciones se han fabricado una unidad por semana, según ha podido saber FARO. El pasado martes le tocó el turno a la primera silueta de Opel. El equipo completo de proyecto está compuesto por 550 personas, de las que 250 forman parte del "grupo industrial", en el que hay operarios, técnicos e ingenieros (personal de la propia planta). Los otros 200 integran el "equipo de ingeniería", y se encargan del desarrollo de procesos y productos asociados al lanzamiento.

Tavares integra las fábricas de Zaragoza (Opel) y Kénitra en el polo ibérico que lidera Balaídos

  • El polo industrial ibérico del Grupo PSA, que agrupa a las plantas de Vigo, Villaverde (Madrid) y Mangualde (Portugal), pronto sumará dos nuevas factorías a su organigrama: Kénitra, actualmente en construcción en Marruecos y que estará operativa en 2019, y Opel en Figueruelas (Zaragoza), tras la reciente compra del fabricante alemán por parte del consorcio automovilístico francés. Lo anunció el propio patrón de PSA, Carlos Tavares, en el transcurso del Salón del Automóvil de Frankfurt: "En el polo ibérico se han de coordinar las cinco plantas, pero además tienen que buscar a los mejores proveedores". El objetivo de esta "coordinación" es generar sinergias, ya que Vigo, Madrid, Zaragoza y Kénitra compartirán la misma plataforma de vehículos, la C MP (Common Modular Platform), que será utilizada en el caso vigués para el lanzamiento del todocamino V20, en 2020, y para el próximo Corsa en Figueruelas. Este uso compartido de plataforma industrial (es una base común para varios modelos, que incluye el grupo motopropulsor, el chasis, etc.) otorga al Grupo PSA un gran poder de mercado en cuanto a compras (se genera una economía de escala) y representa a la vez una oportunidad y una amenaza para los fabricantes de componentes: solo los más competitivos recibirán adjudicaciones, pero los que las consigan surtirán no solo a un modelo concreto en una planta, sino al conjunto de fábricas del polo ibérico. El polo ibérico del Grupo PSA tiene su cabecera en Vigo y está pilotado por el director del centro de Balaídos, Frédéric Puech.

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