Con una concentración con mascarillas y cascos para protestar por la falta de limpieza en las aulas y las "deficiencias de seguridad fácilmente subsanables" debido a las obras de ampliación del colegio. De esta manera iniciaron ayer el curso los alumnos de Primaria del CEIP Alfonso D. Rodríguez Castelao, de Navia. La Asociación de Nais e Pais (ANPA) espera que hoy se pueda recobrar la normalidad, según cuenta, tras recibir el compromiso del Concello de que se efectuará una limpieza "exhaustiva" con un equipo de refuerzo.

El regreso a las aulas para estos 140 estudiantes ya fue retrasado dos días por parte de Inspección Educativa para dar tiempo a la constructora a resolver deficiencias en la seguridad y proceder a la limpieza en profundidad de las instalaciones que ocuparán los niños en la planta baja, mientras los operarios continúan sus trabajos en la superior. Sin embargo, la ANPA constató ayer que no era así y que la situación constituía un riesgo para niños con problemas respiratorios graves. Estos no acudieron ayer a clase y se les unieron otros en solidaridad.

A pesar de que las competencias de Educación son de las comunidades autónomas y que la Xunta es la responsable de las obras de ampliación de este centro, es el Concello el que costea la limpieza durante el curso. Desde la ANPA explica que, en cuanto le trasladaron la situación a la Concejalía de Educación ayer, "no puso pegas" para enviar un refuerzo de limpieza.

El portavoz socialista en el Concello, Carlos López, ha reprochado a la Xunta un inicio de curso "nefasto". Recrimina que sea el Ayuntamiento el que tenga que destinar 1,2 millones en obras en centros educativos, cuando las competencias son de la Xunta.

El delegado de la Xunta, Ignacio López-Chaves cifró en 200 millones el gasto educativo en la ciudad, donde el 88,5% es pago de salarios y defendió que el mantenimiento y la conservación de los colegios corresponde al Concello.

El BNG, por su parte, denuncia la "improvisación" de la Xunta en el colegio Castelao y urgen soluciones. Su responsable local Serafín Otero, considera la demora en el inicio del curso una "falta de previsión e inoperancia" y recuerda que las familias llevaban semanas advirtiendo la situación.