El centro de Vigo será nórdico en Navidad. Una Laponia en miniatura que transportará a los vigueses a la aldea de Santa Claus. Príncipe, Porta do Sol, parte del Casco Vello y las calles aledañas se engalanarán con multitud de abetos naturales, renos tirando de trineos, cabañas de madera, bastones de caramelo, faroles y nieve. Mucha nieve. Habrá hasta una representación de un gran pueblo nórdico en dos dimensiones (25,5 metros de largo por 5,5 de alto) al que los vigueses podrán "asomarse" para ser fotografiados.
Ésta es la temática escogida por la Concejalía de Comercio dirigida por Ángel Rivas para las calles más transitadas de la ciudad en el periodo navideño y cuyo proyecto decorativo se ha licitado por 135.000 euros. Al menos dos empresas ya han presentado oferta.
El frío también predominó en la última Navidad con muñecos de nieve, pingüinos y hasta un oso polar gigante en plena Porta do Sol que llegó a competir con "Dinoseto". En su lugar, y según el citado proyecto, se ubicará este año un conjunto de renos tirando de un trineo de Papá Noel y apoyados sobre un bastón de caramelo inclinado para simular que están "despegando" . Estará decorado con abetos naturales, luces led y deberá habilitarse para que los más pequeños puedan subir y ser fotografiados como auténticos duendes de Santa Claus. Una larga hilera de renos de 90 metros de longitud decorará también la inclinada calle Eduardo Iglesias.
Nada más entrar en Príncipe desde Porta do Sol se instalará el "Marco de Navidad". Serán tres ventanas gigantes en paralelo que simularán una estampa de una aldea navideña nevada por cuyo interior se podrá pasar para quedar "integrado" en el paisaje y ser también fotografiado. De hecho, tendrá un sistema de inyección de aire que lanzará bolas de poliespán para simular una nevada.
En la zona central de Príncipe y a lo largo de toda la calle se instalarán varias islas. Todas con abetos y diferentes motivos. Uno de ellos será un farol gigante (4 metros de altura) en cuyo interior se podrá contemplar una escena de Navidad. También habrá un carrusel de renos. A la altura del museo Marco, y a cada lado de las escaleras principales, se proyectan dos grandes muñecos de madera (soldaditos) de 3,5 metros de alto.
En la zona de la farola de Urzáiz se ubicará un set en el que probablemente se formarán grandes colas para tomar fotografías. Será una cabaña de madera nórdica decorada en su interior con motivos navideños en la que se permitirá la entrada. El Concello baraja incluso que Papá Noel reciba en ella la visita de los niños. Junto a ella se ubicará también el tradicional buzón de correos para las cartas a Santa Claus y los Reyes Magos.
Este contrato abarca solo las calles principales del centro, ya que la iluminación navideña ya ha sido adjudicada. De hecho, la empresa encargada será una de las que el año pasado se encargó de la de Nueva York. Como novedad, destaca la altura del popular árbol de luces de Porta do Sol, que alcanzará los 31 metros.
