Vigo gana atractivo como destino para los turistas extranjeros. El "tirón" cada vez mayor de Cíes, de cuyos encantos ya se han hecho eco medios tan prestigiosos a nivel internacional como The Guardian o The Telegraph; el atractivo de las Rías Baixas y las nuevas rutas aéreas para volar a Peinador desde varios puntos de Italia, Reino Unido, Portugal, Irlanda o Francia, hacen que año tras año sean más los viajeros que se animan a conocer Vigo durante sus vacaciones.

Buena prueba es el resultado que obtuvieron los hoteles de la ciudad en julio. Según los datos divulgados por el INE, durante el primer mes de la campaña estival se alojaron en Vigo cerca de 16.700 viajeros llegados de fuera de España, unos 3.200 más que en el mismo período de 2016 y más del doble de los registrados hace una década. El dato destaca por varias razones: no solo es el más alto para un mes de julio en la serie histórica del INE -que se remonta a 2005-, destaca también si se compara con otras ciudades. A Coruña, por ejemplo, que en varias ocasiones había superado a Vigo en afluencia de turistas extranjeros, anotó poco más de 11.800, lo que significa que los hoteles olívicos acogieron unos 4.900 más. O lo que es igual: 157 más cada día.

El dato también destaca a nivel estatal. De los 106 municipios que analiza el Instituto Nacional de Estadística, en julio solo superaron a Vigo en volumen de viajeros extranjeros 40, entre ellos Santiago de Compostela, que recibió unos 49.300. El dato local está muy cerca del que registró de hecho Pamplona (16.999), que el mes pasado celebró su multitudinaria fiesta de San Fermín, que atrae tanto a turistas del resto de España como de otros países.

Otro termómetro del turismo vigués es la oficina de información que gestiona el Concello, en A Laxe. Entre enero y julio acudieron a ella aproximadamente 10.500 viajeros, de los que el 40% eran extranjeros (4.200). Aunque el dato es ligeramente más bajo que el del año pasado, deja algunas lecturas interesantes. Una de ellas es la de las nacionalidades de quienes optan por pasar sus vacaciones en Vigo. Según las estadísticas que maneja la Concellería de Turismo, entre junio y julio acudieron al mostrador de A Laxe en busca de asesoramiento 176 visitantes italianos, casi un 40% más que durante el mismo período de 2016. Ese significativo repunte se produce el año en el que Vigo logra una conexión récord con Italia: vuelos a Roma, Milán y Bolonia, los dos últimos además operados por la low cost Ryanair, célebre por su agresiva política de bajos precios.

Los principales países de origen de los turistas que recalan en Vigo son -por volumen de visitantes- Reino Unido, Francia, Argentina, Italia, Portugal, Estados Unidos, Alemania, México e Irlanda. En prácticamente todos los casos el volumen de turistas ha sido mayor. Desde los hoteles reconocen un aumento de este tipo de clientela, que vinculan en buena medida con los nuevos enlaces de Peinador.

A pesar del repunte del turismo extranjero, el nacional es el mayoritario. En julio recalaron en Vigo 32.500 turistas españoles, un dato que supera al de los años de la crisis, pero que arroja una caída del 4% con respecto a 2016. Durante ese mismo mes A Coruña acogió a 43.400 visitantes del resto de España. La urbe herculina cerró julio con 6.000 viajeros más que Vigo.

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