La Marea de Vigo dio a conocer ayer una batería de 30 enmiendas a las ordenanzas fiscales de 2018 que incluyen propuestas como congelar todas las tasas y precios públicos o liberar del consumo mínimo de agua a los perceptores de la Renta de Inserción Social de Galicia (Risga). Para estas familias también propone la exención de la cuota de abono, tasa de basura de sus viviendas habituales, saneamiento y la utilización de contadores a medida. Los representantes de Marea reclaman además incluir en la ordenanza fiscal un punto relativo a tasas por el aprovechamiento especial o la utilización privativa del dominio público local, otro de movilidad sostenible y un último que sea regulador de la concesión de subvenciones.

El portavoz de Marea en Vigo, Rubén Pérez, aseguró que es "inconcebible" que una ciudad como Vigo mantenga un consumo mínimo de 30 metros cúbicos bimensuales, algo que ve "imposible con los embalses que nutren a Vigo si los vecinos consumiesen toda esa agua que están pagando". Pérez censura también que "los condicionates económicos de 2018 no justifican una subida de un 2,2%", por lo que aboga por introducir "criterios de ponderación" en ordenanzas como la del IAE.

El alcalde, Abel Caballero, recordó por su parte que un estudio elaborado en 2015 por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) muestra que "el agua en Vigo es más barata" que en la mayor parte de las grandes ciudades de España. Por ese motivo censuró que Marea y PP digan "tonterías" y les emplazó a "tener razones para hablar sobre impuestos".

"La presión fiscal en las ciudades en las que gobiernan las mareas es infinitamente más alta", abundó el regidor olívico: "Tenemos unas condiciones hidrológicas excepcionales y, en esas condiciones, incluso se adoptó la decisión de regalar 30 m3 de agua".