Marea de Vigo propuso ayer al gobierno local que tenga en cuenta las sugerencias y necesidades de los vecinos antes de llevar a cabo las humanizaciones para así "ajustar la obra pública a la realidad de cada barrio". Además, su portavoz, Rubén Pérez, cuestionó "la persistencia en el modelo de las humanizaciones que, en muchos casos ni responden a las demandas vecinales de los barrios en los que se llevan a cabo, no generan ni consolidan empleo y simplemente engrosan las cuentas de resultados de consultoras privadas".

Tras asegurar que hay "quejas" de la ciudadanía al respecto, considera que "ya es hora de comenzar a aplicar dinámicas que garanticen la participación vecinal para estas actuaciones, de modo que cualquier vecino o vecina, esté o no en una asociación en su barrio, pueda participar" en la actuación.

Por ello, propone un "cambio radical" en la concepción de los presupuestos municipales "más allá de la ley Montoro y medidas como el techo de gasto que impiden el uso de los presupuestos para consolidar, por ejemplo, el gasto social".

Tampoco aprueba Marea de Vigo la inversión del superávit en humanizaciones "al arbitrio unipersonal de un concejal o alcalde haciendo un uso partidario y electoralista del mismo" y cita como ejemplo "lo que ocurre meses antes de las elecciones municipales".