La CIG ha registrado dos peticiones ante Inspección de Traballo y la Consellería de Economía para exigir la paralización de las obras de ampliación de Rande tras el fallecimiento de un operario de 54 años el pasado miércoles.

El secretario xeral de Construcción del sindicato, Xoán Xosé Melón, reclama que se suspendan los trabajos mientras la UTE no pone fin a los "incumplimientos" de las condiciones laborales. Si la UTE no paraliza las obras por voluntad propia será la Administración Pública, quien adjudicó el contrato, quien lo haga", sostiene.

Desde la CIG, denuncian que el fatal desenlace podría haberse evitado si se cumpliesen las condiciones pactadas. "Las jornadas extenuantes hacen que los trabajadores corran riesgos graves que ponen en peligro su vida", subraya Melón.

Según el representante sindical, las jornadas de 10 y 12 horas están siendo la tónica habitual en este proyecto ante la presión de un calendario que indica que ya han transcurrido 30 meses desde el inicio de la obra. Además, los salarios son inferiores a lo que correspondería, ya que no se está abonando el plus por festivos ni por trabajos a partir de las 20.00 horas.

Además de la paralización de las obras de ampliación de la AP-9 en el puente de Rande, la CIG también exige que se depuren responsabilidades. "La muerte de un trabajador en su puesto de trabajo no puede quedar impune", advierte el secretario comarcal de la CIG en Vigo, Alberto Gonçalves.