La Audiencia Provincial de Pontevedra ha condenado a seis personas a penas que oscilan entre los cuatro y los siete años y medio de prisión por planear, de común acuerdo, la sustracción de una partida de cocaína que posteriormente destinarían a la venta. Los magistrados de la Sección Quinta, con sede en Vigo, condenan también al vendedor de la droga, arousano. La Sala considera probado que la intención era aprovecharse de la condición de guardia civil de unos de los acusados, el cual simularía un control en la carretera, para poder interceptar a los vendedores y apoderarse así de la sustancia estupefaciente.

Uno de los condenados es Marino Giménez, hermano de Sinaí, al que el tribunal le impone una pena de 7 años y medio de cárcel, así como multa de 90.000 euros, por los delitos de tráfico de drogas y tenencia ilícita de armas. Al guardia civil, Enrique P.M., se le condena por delito de tráfico de drogas agravado por su condición de funcionario público: la sala le impone 7 años de cárcel, multa de 113.000 euros e inhabilitación para el ejercicio de su cargo de agente por tiempo de 15 años. También son sentenciados, a penas que oscilan entre los 4 y los 5 años y medio de prisión, Marcos G.B., Alfonso P.C. y Alfredo I.G., que estaban compinchados con los anteriores para sustraer la partida de cocaína. También resulta condenado Modesto D.A., el arousano al que iban a robar la droga. Otro vecino de esa zona que conducía el coche en el que iba Modesto, Benito O.O., es absuelto de todos los delitos al estimar los magistrados que "no consta que tuviese conocimiento" de que en el coche transportase el estupefaciente.

La sala absuelve a todos los acusados del delito de integración de grupo criminal que les imputaba la Fiscalía. La sentencia no es firme y cabe recurso de casación ante el Tribunal Supremo.