El puerto de Vigo podría experimentar un descenso de más de 100.000 toneladas anuales de tráfico de pesca congelada en contenedor de no solventar los problemas e incidencias que se registran en su Puesto de Inspección Fronterizo (PIF), según las conclusiones de un informe divulgado hoy y elaborado por una consultora externa.

El informe fue encargado por la Autoridad Portuaria de Vigo, cuyo presidente, Enrique López Veiga, lo ha publicado en una conferencia de prensa posterior a la reunión del consejo de administración.

El estudio efectuado en primer trimestre de este año sobre un total de 25 empresas importadoras de pescado y siete transitarias pretende ofrecer un "análisis de la competitividad del puerto de Vigo en los tráficos de pesca congelada en contenedor".

Según López Veiga el informe "confirma que hay una queja generalizada" de los usuarios del puesto dedicado a la inspección fronteriza.