El olor a churrasco regresará este verano a los parques forestales vigueses tras diez años en los que las barbacoas de piedra han sido precintadas por la Policía Local durante los meses de julio, agosto y septiembre. Según pudo saber FARO, la Consellería de Medio Rural está ultimando los trámites necesarios para poder realizar "una autorización excepcional para que este verano se puedan preparar alimentos en esta área recreativa, atendiendo así a la demanda de los comuneros vigueses". Esa área a la que hace referencia, precisan las mismas fuentes, es la zona recreativa gestionada por la Mancomunidad de Montes de Vigo o, lo que es lo mismo, los parques forestales gestionados por las trece comunidades de montes del municipio.
A la espera de que se concreten los requisitos que se contemplarán en esa autorización, una posibilidad que incluye la ley 3/2007 de prevención de incencios, desde la Mancomunidad de Montes de Vigo, su presidente, Uxío González, mostró su "inmensa alegría" al ver como las demandas del colectivo son al fin escuchadas. Hasta el momento, las únicas excepciones a la prohibición autonómica estaban relacionadas con la celebración de fiestas tradicionales o populares que contasen con autorizcación municipal y medidas de seguridad.
"Entendemos que en otros lugares pueda ser una temeridad hacer un churrasco en el monte en pleno verano pero en Vigo no lo es", subraya González, que recuerda que los parques forestales de la ciudad tienen superficies de más de 20.000 metros cuadrados, perfectamente desbrozados y todos cuentan con puntos de agua, además de buenas conexiones y presencia de la Policía Rural y dos parques de bomberos ubicados en el norte y el sur del término muninicipal. "Y además nuestros parques tienen unas vistas increíbles sobre la ría que hay que disfrutar", remarca. Por este motivo, añade el también presidente de la Comunidad de Montes de Saiáns, "lo que es una barbaridad es no poder usarlos". Reivindica que la prohibición que rige del 1 de julio al 30 de septiembre supuso un importante descenso en el número de visitantes que cada fin de semana acuden a comer a los merenderos forestales. "La tortilla y el bocata se llevan a la playa, no al monte", reivindica.
Incendio de Guadalajara
Incendio de GuadalajaraLa prohibición surgió a raíz del gravísimo incendio de Guadalajara que durante cinco días de julio causó la muerte de 11 miembros de los equipos de extinción. Su origen fue una barbacoa que unos excursionistas descuidaron en un merendero que supuso la quema de 10.352,57 hectáreas de monte.
A raíz de ese grave suceso y coincidiendo con la ola de incendios que asolaron Galicia al año siguiente, se restringió el uso de los asaderos de piedra forestales en época de alto riesgo en aquellos municipios declarados zonas de alto riesgo, y tal y como recoge el Plan de Prevención e Defensa Contra os Incendios Forestais de Galicia (Pladiga), Vigo es una de esas zonas.
A partir de entonces, cada 1 de julio agentes de la Policía Local han precintado y sellado los aproximadamente cien barbacoas que existen en los trece parques forestales de la ciudad. También se instalan cada verano carteles informativos alertando sobre la prohibición y las sanciones por quebrantarla.
La medida fue de inmediato contestada por parte de los comuneros vigueses, que incluso amagaron con sublevarse y romper los precintos y realizaron una encuesta para recabar apoyos. Durante su campaña, además remarcaban que "los carniceros notan un descenso en la venta de carne y costilla para asar" durante los meses de verano. Dentro de su campaña reivindicativa de la excepcionalidad de los montes vigueses, el colectivo incluso llegó a organizar una gran barbacoa comunitaria en pleno centro de la ciudad que frustraron las malas condiciones meteorológicas.
