Los vigueses parecen cada vez más concienciados con la necesidad de deshacerse de forma controlada de sus viejos electrodomésticos, muebles antiguos, colchones, persianas, juguetes aparatosos o los restos de una pequeña reforma en sus domicilios. El servicio municipal de recogida de enseres alcanza cifras récord y en los últimos cuatro años ha visto incrementar el volumen de material retirado de la vía pública en un 38%. Aumenta el número de llamadas realizadas por vecinos de toda la ciudad para concertar una recogida con el personal de la concesionaria de limpieza y también el número total de puntos a los que acude FCC a realizar el servicio.
En el año 2016 los camiones de limpieza retiraron de las calles del municipio un total de 2.107 toneladas de residuos voluminosos, lo que supone una subida de la actividad del servicio del 22% con respecto al año anterior, que se cerró con 1.721 toneladas. El salto es de casi el 40% en relación a las cifras de 2013 con 1.523 toneladas, según reflejan las estadísticas municipales, donde constan ya un total de 55 llamadas diarias para avisar de que se van a depositar en la calle maderas, plásticos, neveras y lavadoras, chatarra o colchones, que son los materiales más habituales que carga FCC en sus vehículos junto a los somieres y puertas procedentes de alguna rehabilitación.
El Concello atiende peticiones de lunes a viernes de 09.00 a 14.00 horas y el horario para depositarlos las piezas en el punto indicado por los técnicos municipales es de 22:00 a 23:00 horas el mismo día de la llamada o al día siguiente. En 2015 se atendieron un total de 15.059 avisos para solicitar este servicio gratuito y la cifra subió a 16.499 en los últimos doce meses a pesar de que hay grupos organizados que recorren el casco urbano en busca de maderasy chatarra para llevarlas directamente a un gestor y sacarles algo de dinero.
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El Concello recoge los muebles y electrodomésticos de los vecinos que avisan y representan un tercio de todas las salidas realizadas, pero también acuden ante la denuncia de algún vecino o las alertas que les comunica el personal de limpieza de la noche. En 2016 se acudió a 13.155 puntos de la ciudad con cita previa y a 28.202 donde se habían dejado muebles o chatarra sin control municipal.
Uno de los datos más curiosos que ofrece el balance de FCC es que hay un grupo de calles, siempre entre las más pobladas de la ciudad, que aparecen todos los años entre las localizaciones donde más enseres se retiran. El primer puesto del ranking lo encabeza Travesía de Vigo con 545 llamadas de enero a diciembre del último año seguida por las 376 que realizó algún residente de la zona de Torrecedeira. Otras 340 salidas fueron a Camelias y 299 a la avenida de Castelao. En Teixugueiras se realizaron 252 servicios y le siguen de forma descendente Fragoso, García Barbón, Florida, Sanjurjo Badía y Gran Vía.
Al analizar la producción por tipo de material se observa que las piezas de madera son con mucha diferencia de las que más se deshace la gente con 1.476 toneladas en el último ejercicio, un 70% de todo lo que se recogió. En segunda posición figuran materiales no reutilizables catalogados como "basura" y el tercer puesto es para los colchones con un total de 211 toneladas. El servicio retiró además de la vía pública 105.000 kilogramos de chatarra y alrededor de 20.000 kilogramos de electrodomésticos y otros tantos de plástico.
FCC también retiró para tratar de forma separada 20 toneladas de escombros pese a que los residuos de obra, al igual que los productos sanitarios, no entran dentro de las competencias de este servicio cuando proceden de obras en una vivienda, para la que se debe contratar un contenedor individual.
En el año 2015 el Concello sacó a concurso el contrato de gestión de residuos voluminosos por un total de 422.322 euros anuales que fue adjudicado finalmente por un precio algo inferior que deja en 99,90 euros el precio por tonelada tratada y enviada a Sogama. El próximo mes de julio se cumplen los dos años de vigencia y el gobierno local tendrá que volver a licitar el servicio.
