Durante los peores años de la crisis los hoteles se vieron atrapados en la misma espiral que otros muchos sectores: para contrarrestar el desplome de clientes abarataron sus precios, lo que a su vez redujo al mínimo -e incluso llegó a borrar en algún caso- el margen de rentabilidad. Ahora, con ese oscuro escenario ya superado, los negocios emprenden el camino opuesto: ganan turistas y eso les permite recuperar poco a poco sus niveles de tarifas de hace años.

Los datos que actualiza mes tras mes el INE demuestran que los hoteles reciben más clientela: un 17% entre enero y febrero, lo que les ha dejado su mejor resultado desde 2008. Los rankings que publica Trivago -uno de los principales buscadores y motores de reserva de Internet- constatan además que las tarifas de los alojamientos vigueses empiezan a remontar. Ya lo hicieron el año pasado. Y han seguido haciéndolo a lo largo de los primeros cuatro meses de 2017.

Según los datos de Trivago, en marzo y abril el coste medio de alojarse en una habitación doble en Vigo ascendió a 68 euros. Por encima de 2016 -cuando se pedían 64 y 59, respectivamente- y de los últimos años. En 2015, por ejemplo, la factura por la misma estancia apenas pasaba de los 50 euros. En el caso concreto de abril hay que remontarse a 2012, cuando la minuta por el mismo cuarto doble ascendía a 71 euros, para encontrar un precio superior. Al igual que en esta ocasión, entonces la Semana Santa también cayó en abril.

Para encontrar las tarifas más altas todavía quedan sin embargo varios meses. En julio y agosto de 2016 el precio de una habitación doble llegó a oscilar entre los 87 y 99 euros, unos 30 más que a principios de ese mismo año. La razón de ese pico es la marea de viajeros que llega a Vigo para disfrutar de sus vacaciones de verano, atraídos por las Cíes, las playas, la gastronomía y un clima cálido pero mucho más suave que el que se registra en el centro y sur peninsular.

En octubre también se percibe un repunte de tarifas ocasionado por la alta demanda que genera Conxemar. De hecho, en 2012 Trivago registró sus tarifas más altas para Vigo en octubre. Alojarse ese mes en una estancia doble costaba 84 euros, siete más que en agosto, cuando se registra el "boom" del turismo vacacional. En 2015 fue el segundo mes más caro y el año pasado, el tercero.

A pesar de que las tarifas se recuperan en Vigo, el coste de alojarse en la ciudad sigue siendo muy inferior al de otras ciudades de España. Según Trivago este mismo mes el precio medio de una habitación doble en España fue de 119 euros, casi el doble que en Vigo, donde el promedio fue de 68. Algo similar ocurrió también en marzo, cuando la media estatal se situó en 106, unos 40 euros más que lo que costaba pernoctar en Vigo.

En abril, marzo y febrero los alojamientos olívicos se mantuvieron de hecho en el "Top 10" de los destinos más baratos de Trivago, que examina en total 40 municipios repartidos por toda España. En abril se situó como la quinta ciudad más barata, en marzo como la novena y en febrero como la décima.

En enero -cuando la tarifa era de 66 euros- Vigo se posicionó como la 12ª ciudad más económica del listado. Según Trivago, este mes de abril solo han sido más baratas Lugo, Castellón, A Coruña y Lleida. En este último municipio se anotaron 62 euros, lo que lo coloca a la cabeza de destinos low cost. Son solo seis menos que en Vigo.

En el extremo opuesto se sitúan este mes Barcelona, donde se piden de media 168 euros por un cuarto doble; y Palma, donde la minuta alcanza los 161. En Sevilla la estancia doble cuesta de media 148 euros y en Madrid, 126. Valores todos bastante alejados de los que se alcanzan este mes en Vigo.

En Galicia el ranking de Trivago analiza cuatro ciudades: A Coruña, Santiago, Vigo y Lugo. Esta última es la más económica de todas ellas, con un coste de 64 euros. Le sigue A Coruña, con 66, y Vigo, con 68. De los cuatro municipios el más caro es Santiago, que alcanza una media este mes de 75 euros. A pesar de la gran cantidad de turismo que mueve gracias a la Catedral y el Camino, el año pasado los hoteles de Vigo alcanzaron en verano un mayor coste que los de Compostela. En julio se pagaba en Vigo 87, frente a los 84 de la capital gallega.