El Álvaro Cunqueiro despidió ayer a los 101 estudiantes de sexto grado de Medicina que eligieron este centro sanitario para realizar sus últimas prácticas de la carrera. Una semana antes de su acto de graduación, el próximo miércoles en Santiago, los jóvenes protagonizaron en Vigo un acto en el que los profesionales del hospital les dieron las últimas orientaciones y consejos para su futuro laboral y los propios estudiantes eligieron despedirse con humor, protagonizando un videoclip versionando el tema "Despacito" de Luis Fonsi. Con el título de "Suspensito", los alumnos pusieron el broche final a un año de prácticas rotando por los distintos servicios del hospital.
"Estáis ante un momento crucial", les recordó Alfonso Amado, pediatra del centro que junto a la neumóloga Cristina Ramos abrió el acto oficial con la conferencia conjunta "Agora tócache decidir" en la que quisieron dar a los jóvenes las pautas necesarias para afrontar el paso siguiente que les espera, que es el examen MIR y la posterior elección de especialidad y hospital donde permanecerán durante el periodo de residencia, que oscila entre los dos y los cinco años. "Más allá de las especialidades es muy importante el sitio", dijo Amado, quien propuso a los estudiantes tomar la decisión "pensando en los próximos cinco, diez, quince y veinte años". "Hay muchísimas especialidades y es muy complicado saber en qué consiste cada una, por eso recomiendo centrarse en las vocaciones generales y a partir de ahí elegir", explicó Amado, quien con humor relató que los "mejor pagados y que mejor viven son los dermatólogos, seguidos por los traumatólogos y al final de la lista están los pediatras. Pero no todos podemos ser dermatólogos". Existen medio centenar de opciones, entre las cuales Oftalmología fue la primera en separarse de la medicina general, en el siglo XIX y Genética Clínica, la última en hacerlo, en 1993.
Al igual que él, la doctora Ramos también destacó los atractivos del complejo hospitalario vigués con sus nuevas instalaciones, su innovación tecnológica, sus estándares de calidad y su apuesta por la investigación y la docencia.
Tras ellos, el coordinador del grado, José Ramón Fernández Lorenzo, agradeció a los jóvenes la elección del hospital vigués para realizar sus prácticas y también subrayó que éstos a través de un cuestionario de evaluación calificaron con un 4 sobre 5 su experiencia en el Cunqueiro. "Es la primera vez que hemos tenido tantos alumnos y fue complejo pero ha sido posible gracias a un cambio de motivación y una actitud evidente que ha permitido pasar de los 50 colaboradores docentes que había hace tres años a los 463 que hubo este curso", subrayó Fernández Lorenzo, que precisó que este curso hubo 23 profesores asociados tras la incorporación en mayo pasado de nueve docentes.
El también pediatra desgranó los resultados provisionales de la encuesta, en la que los estudiantes destacaron como positivo la implicación del personal especialista, la acogida y el trato amable de éstos, la planificación y el hecho de que se incluyese la comida durante las guardias.
En el ámbito más negativo, añadió el coordinador del grado, los universitarios consideraron que el número de guardias fue excesivo y que faltó una mayor programación de talleres prácticos además de solicitar una mejora en la programación de las rotaciones por los servicios que en algunos casos hubo que determinar por sorteo.
En total, los universitarios trabajaron sobre siete materias: clínica médica, clínica quirúrgica, urgencias y servicios centrales, clínica obstétrica y ginecología, clínica pediátrica, clínica psiquiátrica y medicina familiar y comunitaria.
"Intentaremos que el año que el año que viene todo salga mejor", señaló el gerente del EOXI, Félix Rubial, quien destacó la importancia de hacer este tipo de evaluaciones para corregir los posibles errores. Durante su intervención, hizo hincapié en que la de Vigo es el área sanitaria más grande de Galicia y que el complejo también es el mayor de la comunidad. "Ya todos lleváis en el ADN a Vigo, este es un sitio donde consolidar vuestra carrera, es un ecosistema perfecto para estar en esa cresta de la ola y superarla para llegar hasta donde queráis", recalcó.
Tras los profesionales, una de las vicedelegadas del curso, Paula Santos Patiño, tomó la palabra para agradecer el trato recibido por parte de los profesionales y asegurar que tanto ella como sus compañeros se van de Vigo con un "balance positivo" de su paso por el hospital. "Aquí tuvimos la posibilidad de recibir una formación más especializada y por eso elegimos Vigo en vez de Santiago", explicó la universitaria, que recordó que los que vuelvan al centro lo harán ya en calidad de residentes.
