La dolorosa resaca con la que amanecieron los vigueses tras la eliminación del Celta en la Copa del Rey trascendió ayer jueves el ámbito deportivo y dio el salto a la arena política. El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, retuiteó un mensaje de mofa de un periodista de Madrid tras la derrota frente al Alavés y desató en primer lugar la ira de los aficionados en redes sociales y acabó horas después con el gobierno vigués cuestionándo su legitimidad como número dos de la Xunta: "¿Puede ser vicepresidente alguien que se ríe de Vigo?", se preguntó el portavoz vigués, Carlos López Font, mientras mostraba en una cartulina el comentario que dio origen a la polémica y que se publicó apenas minutos después de que sonara el pitido final en Mendizorroza y con los ánimos calientes.

El presentador deportivo Josep Pedrerol, que en los últimos días responsabilizó directamente a Abel Caballero de la suspensión del partido Celta-Real Madrid del domingo, aprovechó la derrota celeste para vengarse de su último enemigo y nada más conocerse la clasificación del Alavés publicaba en su cuenta de Twitter un elocuente "¡Alcaldeeeeeeee!" con el que la afición se sintió indignada. Los mensajes de apoyo al Celta y a Vigo comenzaron a sucederse, pero en medio de la vorágine Alfonso Rueda optó, sin embargo, por retuitear ese contenido y harcelo suyo.

La reacción fue inmediata y se produjo un aluvión de críticas. Así que a los pocos minutos el polémico retuit desaparecía de una cuenta del vicepresidente de la Xunta y presidente del PP de Pontevedra que tiene 1.520 seguidores. En su lugar, Rueda optaba por censurar el comentario del periodista pero añadía una crítica al regidor vigués: "Una pena que se alegre de la derrota de un equipo que lo merece todo solo porque alguien no ha estado a la altura de su ciudad", en alusión a Caballero y su gestión sobre los daños del temporal en el estadio de Balaídos.

Siguiendo con este nuevo tono de comprensión hacia la afición del Celta, el vicepresidente publicó otro comentario en Twitter donde felicitaba al Alavés y apelaba a estar "orgullosos" del juego celeste "también en las derrotas". Cerraba con un "Hala Celta!!!". Sin embargo, sus últimos mensajes se publicaron cuando numerosos vigueses y aficionados ya habían incendiado las redes sociales con críticas y descalificaciones.

La propia presidenta de la Diputación, Carmela Silva, se sumaba al carrusel de reprobaciones y le exigía disculpas "inmediatas" . También el segundo teniente de alcalde, David Regades, aseguraba "no tener palabras".

pic.twitter.com/iHCDMhMt8e„ Carmela Silva (@carmelasilva) 9 de febrero de 2017Más duro fue el portavoz del gobierno vigués, Carlos López Font, que tildó lo ocurrido de "gravedad extrema" y atribuyó el borrado del retuit inicial a la presión ejercida por los aficionados:"Fue una actitud cobarde, sin reconocer la gravedad de lo que había hecho". Font contrapuso que [el vicepresidente] estuviera "contentísimo" cuando "cientos de miles de vigueses lloraban" e insistió "en el odio de Rueda a nuestra ciudad" y no dudó en preguntarse: "¿Puede tener Galicia un vicepresidente que se ríe y mofa de Vigo, del Celta y de su alcalde? ¿Es digno de su cargo?", se preguntó el socialista, que reclamó la intervención del presidente Alberto Núñez Feijóo.