El Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS) remitió ayer al Concello de Vigo las correcciones en el plan parcial de San Paio de Navia necesarias para tramitar el proyecto de ampliación del polígono residencial. Urbanismo había aprobado la última semana de diciembre un informe alertando de que faltaba documentación para cumplir con las nuevas exigencias de la Lei do Solo y contactos entre ambas administraciones han permitido resolver en apenas tres semanas los fallos detectados para poder seguir adelante con un proyecto que permitirá construir 165 viviendas unifamiliares y otras 1.430 distribuidas en bloques colectivos de aquí al año 2020.
La Xunta prevé que en el próximo mes de febrero pueda iniciarse el proceso de firma de escrituras de compraventa y pago del suelo ofrecido por los propietarios en la oferta pública de adquisición realizada el año pasado. Hay otros propietarios pendientes de presentar más documentación o realizar todavía algunos trámites. Se prevé adquirir mediante acuerdo en los próximos meses un total de 62 fincas con una superficie de 42.740 metros cuadrados por importe de ocho millones de euros.
Esta primera fase de compra de suelo se completará en 2017 tras ser ampliado el presupuesto en dos millones de euros el pasado 22 de diciembre. El suelo restante se logrará con permuta de terrenos por edificabilidad en los ámbitos pendientes de desarrollar y a través de un expediente expropiatorio que podría llevar más tiempo.
El plan parcial divide la ampliación en tres fases y se prevé que el primero que se urbanice sea el que permite el enlace del sector de San Paio de Navia con la arteria urbana que constituye la avenida de Europa. Este nuevo polígono es además uno de los que concentra más vivienda protegida y las obras podrían estar finalizadas a finales de 2018 para dejar luego paso a la segunda fase del proyecto en los años siguientes.
El nuevo plan parcial de Navia amplía la capacidad de construir viviendas protegidas desde las 613 inicialmente previstas a casi 1.600 nuevas viviendas a ambos lados de Teixugueiras. El presupuesto de la Xunta para 2017 reservaba 5,5 millones para el proyecto a los que luego se incorporaron dos más. El Ejecutivo y el Concello chocaron inicialmente por la fórmula elegida para tramitar el plan, ya que el Concello pedía hacerlo a través de la ley exprés habilitada tras la suspensión del PXOM y la Xunta veía necesario hacer una modificación para ajustarlo al planeamiento en vigor de 1993.
