No hay exhibición turística de Galicia que no incluya las bondades de su gastronomía y los actos de la Diputación y el Concello de ayer en Fitur coincidieron con la degustación de uno de nuestros platos más típicos a cargo de una "pulpeira" ante la que no dejaban de formarse colas en el expositor de la comunidad.

La delegación viguesa se resarció poco después en el Espacio Atlántico, donde Pepe Solla y Gerson Iglesias, chef del Ruxe Ruxe, ofrecieron un menú inspirado en las islas Cíes en el que no faltó ni el pulpo ni los mejillones de Monteagudo o el jurel de Faro y que remató con un postre de castaña inspirado en la playa de los Alemanes.

La presentación de la candidatura a Patrimonio de la Humanidad de las Cíes contó con el respaldo de los alcaldes pontevedreses, así como de la presidenta provincial Carmela Silva, varios diputados y concejales de la corporación viguesa incluida la portavoz del PP local, Elena Muñoz.

La representación viguesa se completaba con miembros del sector turístico, de la Universidad de Vigo y de otros ámbitos sociales y culturales de la ciudad. Todos acudieron para dar fe del extraordinario tesoro que sirve de monumental puerta de acceso a una ría única.

Precisamente, el alcalde no quiso olvidarse en su intervención de destacar las posibilidades de ocio para todas las edades y perfiles de turistas en una ciudad "donde nunca amanece" y con un "secreto" que la hace única: quien la pisa por primera vez "quiere quedarse para siempre".