Las islas constituyen los mejores laboratorios para estudiar los procesos evolutivos de especies que permanecen aisladas durante millones de años. Análisis genéticos como los realizados por Sara Rocha permiten diferenciar linajes muy antiguos de colonizaciones muy recientes e incluso de especies invasoras.

Los estudios de esta experta también resultan muy útiles para determinar la evolución de otros organismos de Seychelles mucho menos conocidos como invertebrados o plantas. Hace unos meses, Rocha publicaba en la revista Biological Journal un artículo sobre la diversidad hasta ahora ignorada del gecko gigante dorado, un reptil arborícola del tamaño de una mano y endémico del archipiélago.

"Es muy interesante porque se está descubriendo ahora que poliniza la palmera coco de mar, otra especie endémica. Ambas están interconectadas. En las islas, la flora y la fauna coevolucionan y se adaptan y es necesario conocer cómo se relacionan para poder establecer acciones de conservación de ambas", apunta.