A pesar de que se trata de la segunda patología neurodegenerativa más frecuente tras el alzhéimer, las donaciones de cerebros de pacientes con enfermedad de Parkinson solo representa el 7% de las recogidas en España. Para elevar esta baja tasa y que los investigadores dispongan de muestras con las que investigar, a principios del próximo año se pondrá en marcha el Programa Nacional de Donación de Cerebro en Enfermedad de Parkinson y el Banco de Cerebros del Hospital Álvaro Cunqueiro será el encargado de coordinar a los otros diez españoles que participan.
Es la primera vez que se realiza una campaña de captación nacional multicéntrica sobre esta enfermedad. La iniciativa está enmarcada en el estudio "Coppadis" -COhort of Patients with PArkinson´s DIsease in Spain-, que lidera el neurólogo Diego Santos, del hospital de Ferrol. Financiado por la Fundación Curemos el párkinson, tiene como objetivo conocer en detalle la evolución de la enfermedad e identificar marcadores -clínicos, genéticos, moleculares o de neuroimagen- que permitan predecir el desarrollo de complicaciones para tratarlas de forma precoz y adecuada. Arrancó en 2015 y está en fase de reclutamiento -en el Álvaro Cunqueiro, se encarga la neuróloga Gema Alonso-. Aspira a contar con la participación de 800 pacientes y 400 de sus cuidadores. A falta de un año, lleva alrededor de la mitad.
La idea es que los médicos implicados en el estudio propongan a estas personas que se conviertan en donantes de cerebros. "Aprovechando el estudio, queremos hacer este esfuerzo", explica el doctor Santos. La bióloga Susana Teijeira, del biobanco del Álvaro Cunqueiro, es la encargada de poner en contacto a los bancos de cerebros con los 45 hospitales que participan en el proyecto y a los que acuden estos pacientes. "Tienen que conocer el protocolo, saber a quién dirigirse, contar con el consentimiento informado...", detalla la bióloga.
Estos cerebros se incorporarán a la colección del biobanco y se ponen a disposición de los investigadores que lo demanden, tras la aprobación de los correspondientes comités. El doctor Santos destaca la importancia del estudio patológico de los cerebros una vez fallecido el paciente "para entender la enfermedad". Además, es necesaria para la confirmación del diagnóstico. Aunque la fiabilidad de la detección clínica por los síntomas es ya de un 80% en la primera consulta, se puede confundir o solapar con otras enfermedades neurodegenerativas, sobre todo, en los enfermos de párkinson que acaban demenciando.
Teijeira cuenta que, mientras los pacientes con alzhéimer suponen el 30% de los donantes en el banco vigués, las muestras de enfermos de párkinson representan solo el 2%. Sospecha que se debe a que, por lo general, en el primer caso, los que toman la decisión de donar "son los familiares que lo están cuidando y suelen estar muy concienciados". Mientras que en el segundo caso, "la toman ellos mismos, tienen que hacer un esfuerzo activo y les cuesta más".
160.000 afectados en España
El estudio "Coppadis" es el primero de estas dimensiones sobre el párkinson en España. Se prolongará hasta 2023 y cuenta con dos millones y medio de financiación.. En él están implicados 130 investigadores, que realizarán evaluaciones completas anuales durante un lustro a los 800 enfermos que esperan reclutar y a los 400 cuidadores -. En un grupo más reducido, completarán estos exámenes con 800 resonancias magnéticas craneales y 400 estudios genéticos, con el objetivo de buscar marcadores moleculares que contribuyan a predecir la evolución de la enfermedad.
En España hay más de 160.000 personas diagnosticadas, 30.000 que no lo saben y 10.000 nuevos casos que se detectan cada año.
