Atentado contra la libertad sindical, allanamiento de morada a una persona jurídica y daños. A estos tres delitos se ha enfrentado esta mañana en el Juzgado de lo Penal número 1 de Vigo José Carlos Ribeiro Otero, supuesto miembro sindicalista que durante la huelga del metal de mayo de 2009 presuntamente entró en una nave empresarial que trabajaba bajo puerta cerrada rompiendo varios cristales y destrozos varios.

El propietario del recinto aseguró no haber visto los incidentes, que sí captaron una cámara de seguridad, pero sí se encontró "sangre en varios cristales y a un encapuchado corriendo".

Mientras la acusación particular pide tres años de prisión para el acusado, la fiscal y la defensa han solicitando la absolución, afirmando éste último que en el vídeo no se acredita la existencia de que el varón llegase a sangrar ni tampoco su completa identificación