La mayor facilidad para acceder a los apuntes de otros compañeros no implica que los universitarios no deban pisar el aula o recurrir a libros de texto, advierten los docentes. "Hay que aprovechar las posibilidades de las nuevas tecnologías. Estos repositorios no sustituyen las clases, pero todo lo que sea compartir y poner en valor el material docente me parece buena idea. Es más, yo lo promovería", señala Carlos L. Ardao, profesor de Ingeniería de Telecomunicación y decidido defensor de las metodologías digitales.

"Antes las clases eran magistrales y podías ir solo al examen con material prestado por un compañero pero ahora son mucho más importantes y la evaluación es continua. En eso hemos mejorado. Por tanto estas iniciativas son un complemento, porque lo que aprendes en el aula no te lo pueden enseñar unos apuntes", añade.

Ardao es un usuario activo de FaiTIC: "Los profesores ya compartimos el material. Mis presentaciones son intencionadamente un poco más extensas de lo que recomiendan los estándares para que les sirvan casi de apuntes a los alumnos".

Calidad

También destaca el valor de estas iniciativas en asignaturas que carecen de libro de texto, algo habitual en las ingenierías. Y apunta que el único inconveniente es la calidad: "Nunca será un material excelente porque el alumno no tiene la misma comprensión de la asignatura que el profesor, pero siempre hay formas de filtrar. Hoy en día, estamos muy habituados a utilizar las recomendaciones y las valoraciones de restaurantes y hoteles, por ejemplo".

De hecho, las plataformas cuentan con diferentes sistemas para que los propios usuarios puntúen el material, sobre todo las que pagan por ello.