Los bomberos permanecieron alerta a cualquier emergencia a lo largo de toda la mañana, a pesar de la abundancia de visitantes. A primera hora tuvieron dos salidas. Fueron por asuntos poco importantes. A la una y media de la tarde sonó la sirena y se puso en marcha el operativo real para la salida de uno de los camiones. No era nada grave, según informaron. La masiva presencia de personas provocó pequeñas retenciones en la avenida de Ángel de Lema. La Policía Local se encargó de regular el intenso tráfico. Aparcar fue un problema. Algunas personas dejaron su vehículo a más de un kilómetro del parque.