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La hoja de ruta del Sergas

El área sanitaria de Vigo vaticina un "tsunami" de pacientes mayores y crónicos en un lustro

Aunque la población desciende ligeramente, los mayores aumentan un 11% y los ancianos un 28%

El Sergas debate con profesionales la hoja de ruta que se debe seguir en los próximos años en el área sanitaria viguesa. Para establecer los retos, primero hay que analizar la situación y detectar los problemas. El envejecimiento de la población -y las consecuencias que de él se derivan- se alza como el mayor de todos. El estudio que la Dirección encargó a una consultoría externa vaticina un "tsunami" de pacientes crónicos, pluripatológicos y de edad avanzada para el 2021. La franja de usuarios que más recursos consume.

La edad media de la población del área viguesa, en 2015, era de 44,41 años. Aún son dos años y medio menos que en el resto de Galicia, pero casi tres más que hace una década. Esta "fuerte tendencia al envejecimiento de la población" se traduce en una creciente tasa de dependencia. Si en 2005 había dos niños o mayores de 65 años por cada cinco personas en edad productiva (43%), ahora ya es uno cada dos (51%) y la proporción escalará hasta el 55% en 2021. Una progresión que, en los últimos diez años, ha sido mayor en la comarca que en el resto de Galicia -un crecimiento del 26% en la tasa de dependencia de mayores, frente al 13% gallego-.

El número de habitantes del área baja. Lo hizo en un 1,3% desde 2005 y lo hará en un 2,3% más hasta 2021, cuando se situará en 552.742 personas. En total, pierde algo menos de 21.000 ciudadanos en 16 años. La caída general que se prevé no es muy grande, el problema es que se concentra en solo dos grupos de edad: el de los menores de 15 años -se reducirá un 14% en el próximo lustro- y el de los adultos de 25 a 44 años -un 17%-. Mientras, los ancianos aumentan un 28% y los mayores entre 65 y 84 años, un 11%.

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Los grupos que más crecen son precisamente los que más uso de los recursos sanitarios realizan. Así, este estudio externo calcula que, en 2021, pese a que la población habrá descendido, los facultativos de los centros de salud del área viguesa atenderán 101.502 citas más -una subida del 2% hasta las 5,6 millones-. Los del Chuvi también pasarán consulta 10.077 veces más -un aumento del 1,4% hasta las 729.381-. Y las camas de los hospitales tendrán una mayor ocupación, ya que los ingresos se elevarán un 2,5%.

Pero quienes más notarán este envejecimiento dentro de un lustro será las unidades que tratan las enfermedades cardíacas, como puede ser Hemodinámica y cardiología intervencionista -diagnostica y trata patologías cardiovasculares como el ataque al corazón mediante el uso de catéteres e visión con tecnologías de radiología digital-, que crecerá un 9%. Uno de los trastornos que afectará a más población será la insuficiencia cardíaca, la incapacidad del corazón de bombear la sangre necesaria para llevar todo el oxígeno y los nutrientes que requiere el organismo. Los ingresos por esta causa se han duplicado en el Chuvi en una década y ya es la primera causa de hospitalización en mayores de 65 años.

Actividad en 2015

El área registró el año pasado 93,6 hospitalizaciones por cada mil habitantes y la franja de edad que más ingresó fue la de 90 a 94 años -380 veces por cada millar de personas-, pero los de 80 a 84 años fueron mayoría en términos absolutos con casi 4.000 ingresos -un 9% del total-. Exceptuando a los bebés y las embarazadas, la frecuencia de ingreso de la población se mantiene por debajo de los 100 por cada mil pacientes hasta los 60 años. A partir de aquí, la progresión es meteórica.

Los mayores también son los principales usuarios en las consultas de especialistas. Hasta los 25 años, los vigueses van menos de una vez al año. A los 55, superan las dos visitas anuales y, a los 70, las tres. Alcanzan el máximo entre los 75 y los 79 años, con 3,49 citas y, a partir de ahí, vuelven a descender. De hecho, los ancianos que sobrepasan los 95 son a los que menos derivan -0,60-. De media, los habitantes del área recurren 10 veces al año al médico de familia. Pero, hasta los 60 años, todas las franjas de edad se quedan por debajo de esta cifra, salvo los bebés. A partir de los 75 años, se duplica la frecuencia.

Así, la actividad de consultas y hospitalización se concentra en los segmentos de población que más crecerán en los próximos años. De ahí la necesidad de "potenciar la atención al paciente de edad avanzada pluripatológico" y al crónico, así como la prevención, tal y como recoge el estudio. Los profesionales también apuntan la necesidad de reforzar los centros de salud, para vigilar y asistir a una población mayor mientras permanecen en sus casas, evitando la necesidad de ir al hospital. En la actualidad, la saturación de los ambulatorios vigueses es elevada, con 9 de cada 10 médicos de familia con el cupo lleno.

Proponen atraer embarazadas del norte de Portugal ante la caída del número de partos

  • Teniendo en cuenta el descenso del número de mujeres en edad reproductiva que se prevé que sufra el área sanitaria viguesa hasta 2021, el número de partos se reducirán en torno a una sexta parte. Así, las proyecciones indican que de los 3.643 nacimientos registrados en el Chuvi en 2015, se quedarán en 3.050 en un lustro.Están muy lejos de los 4.641 que alcanzó en 2008. Es un tercio menos. Ante esta situación, surge el problema económico de que los recursos obstétricos del complejo sobren. Así que se buscan otras vías para poder rentabilizarlos.La consultora externa que ha realizado el análisis de la situación del área sanitaria para el Sergas propone en su estudio atraer demanda de más allá de los límites del área sanitaria. En concreto, se fija en las embarazadas del norte de Portugal. Sin embargo, los facultativos consultados dentro de los foros para la elaboración del plan estratégico "Estratexia XXI", se muestran bastante escépticos con esta opción.Más de dos tercios de los partos registrados en el área sanitaria en 2015 fueron de mujeres de entre 30 y 39 años. Una sexta parte fueron madres entre los 25 y 29 años y, un 6%, con menos edad. De ellas, 37 eran menores de 19 años. Una de cada diez tenían más de 40 años y una, superaba los 50.

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