Como si Feijóo intuyese la tormenta que amenazaba al Puerto de Vigo llamó a un capitán bregado en mil batallas. Procedente del Senado, Enrique López Veiga afrontó la presidencia de la Autoridad Portuaria con 68 años motivado por enfilar el epílogo a su extensa trayectoria pública dentro de un campo como el marítimo que domina a la perfección. No ha perdido ni un ápice de la ilusión con la que asumió el timón de Praza da Estrela el 27 de octubre de 2015 a pesar de que en su primer año ha sufrido colisiones importantes. La marcha de Maersk, el desvío de mercancías a Leixões, el bajón en el número de cruceros... Pero frente a la zozobra, se crece. López Veiga se dispone a dar la batalla para revertir la situación y frenar así la sangría de tráficos en los muelles. Y entiende que ataca al origen del problema: el monopolio de la estiba. "Es lo que está matando al Puerto de Vigo", afirma.
- Con su presidencia, el Puerto ha pasado de la calma chicha al vendaval. Parece un sello que marca buena parte de su trayectoria.
- ¿Y yo qué culpa tengo de que surjan los problemas ahora? Hablo en general, hay personas que prefieren dejar las cosas como están y prevalecer a toda costa la paz social y otras que entienden que a los problemas si no les haces frente, al final acaban pasándote una factura mucho más cara. Y soy soy de estos últimos.
- ¿Aunque sea enfrentándose a Puertos del Estado, la administración de la que depende?
-- ¿Pero qué es un enfrentamiento? Decía el conde de Gondomar: "Decir verdades a reyes es servir bien". Bueno, pues si yo tengo una verdad objetiva, y tengo que escribirla y formularla, eso no es ser desleal sino es poner blanco sobre negro lo que nos pasa y poner las cosas encima para que se arreglen. Estamos en un momento en el Puerto de Vigo con unos serios problemas de competitividad y hay que corregir todos los aspectos para revertir situación y que Vigo siga estando en cabeza en eficiencia, eficacia y sostenibilidad.
- Se cansa de decir que se limita a hacer cumplir la legalidad pero entonces la opinión pública podrá pensar, y con razón: ¿Es que hasta ahora el Puerto actuaba al margen de la ley?
-Yo no juzgo a nadie ni al pasado. Sólo puedo responder de mis decisiones.
- En una ocasión reveló que alguien le había pedido "mirar para otro lado" para que dejase las cosas tal como están. ¿Quién fue?
-Un estibador. Pero al menos ese fue sincero, y lo dijo en un tono desenfadado. Pero hay otros que sé que agradecerían que mirase para otro lado. Y no están en el sector de los trabajadores. No digo más.
- ¿Algún compañero de partido?
- No. Tengo el apoyo incondicional del partido en Vigo.
- Antes de asumir el cargo parecía que el Puerto marchaba más o menos bien, pero fue llegar usted y cambió el panorama. De repente es una terminal cara, pierde tráficos y caen sus principales mercancías.
- El de Vigo es un puerto que está para servir a la industria, no tiene otro fin. Todo lo que por aquí entra va a las factorías de la industria local y todo lo que sale, sale de la industria local. Es un elemento más de la competitividad de la industria viguesa. Por eso es tan sensible y le afecta más que a otros puertos el funcionamiento de la Sagep. La pervivencia de la estructura de la Sociedad de Estiba es lo que está matando al Puerto de Vigo, sobre todo la rigidez en sus procedimientos es lo que nos mata.
- En público también señaló a los salarios de los estibadores.
- También dije que no son los sueldos el problema principal. De hecho los salarios de los trabajadores es, al menos de momento, un problema asumible. El problema es la rigidez en la organización del trabajo. Que cuando se les llame para una labor cobren por seis u ocho horas cuando sólo hacen dos; el que se terminen la descarga en un barco en el horario laboral y no puedan ir a trabajar a otro buque? Todo esto y más genera unos extracostes que no son razonables. Y esto es negociable. Si entre las empresas y los trabajadores hay un poquito de buena voluntad se puede avanzar muchísimo en ese campo. Así Vigo podría incluso colocarse a la cabeza en competitividad.
- Pues ambas partes sólo se han puesto a negociar cuando les apercibió de su ilegalidad y amenazó con denunciarles a la Comisión Nacional de la Competencia.
-- Sólo les recordé lo que dice la ley. Aunque esta le da una prerrogativa de monopolio a la Sagep le pone unos límites muy estrictos. Está recogido en la sentencia del Supremo de abril de 2016, que viene a decir que la actual ley ya es un intento de liberalización, y por tanto, que los derechos de monopolio no pueden ir de ninguna manera más allá de lo que dice la Ley, el IV Acuerdo Marco. Y esto es lo mismo que digo yo. Así que tienen que corregir extralimitaciones.
- ¿Pero es la estiba el mal de todos los males, lo que torpedea la competitividad del Puerto?
- De ninguna manera es el único problema pero si una de las causas principales de los sobrecostes que solucionándola podría generar muchos ahorros a los operadores y traspasarlos a su vez a la industria. Ahora que empresas y trabajadores entran en un periodo nuevo negociador confío en que ambas partes sean sensatas y se adapten al marco legal: el IV Acuerdo Marco y dentro de lo que dispone la ley. ¿Que esto sea suficiente para mejorar la competitividad? No, pero es obvio que la Sagep está tocada de muerte. No lo digo con ánimo de injuriar, es que es la verdad. No va a seguir todo igual. Tiene que haber competencia y no puede haber esta rigidez salarial y de organización de los trabajadores.
- Considerando la subasta de tráficos de Maersk que ganó Marín como la peor noticia de su primer año, ¿cómo interpreta que la naviera trasladase líneas al puerto vecino por los altos costes de Vigo y ahora asuma más gastos compartiendo en ambos puertos la escala de Algeciras?
- Estoy encantado de que mantenga la doble escala. Maersk sabrá por qué lo hace. Han hecho gestos; se iban a ir en mayo y ahora mantienen esto. Yo lo que quiero es que vuelvan y tengo la esperanza de que así sea. Creo que la naviera acabará apreciando los esfuerzos que hace Vigo por reconducir la situación y sabe que desde el momento en que se modifique la ley entramos en una terminal competitiva y hombre, la terminal de contenedores de Vigo no tiene color en términos de medios con la de Marín.
- Llegó a pedirle a Puertos del Estado que prohibiese operar a la naviera danesa en Marín. ¿Hacía falta meterse con este puerto para dar soluciones al vigués?
- Yo no me he metido con el puerto de Marín. Es obvio que si se me escapa tráfico de aquí porque hay una subasta que entiendo que se celebra en términos que no son de igualdad de condiciones, debo protestar. No tengo nada en contra del puerto de Marín. Me parece que bien ordenado con el de aquí son puertos complementarios pero el principal es el de Vigo porque es el que tiene la industria más fuerte. Sobre su ilegalidad, simplemente he señalado lo que dicen los tribunales de justicia, no acusé a nadie. Recordé su situación jurídica y recomendé que en esas circunstancias no se puede autorizar una operación así. Yo como administrador prudente no lo hubiera hecho.
- La carga y descarga de vehículos nuevos sin matricular es una actividad liberalizada que los operadores de Bouzas siguen contratando a la estiba. Para presionarles a rebajar costes echando mano de la libre contratación de mano de obra, ha aprobado su primera subida de tarifas. ¿Y esto no acabará afectando a PSA?
- Nosotros tenemos que aumentar las tarifas porque las actuales no nos cubren las pérdidas de un millón de euros en el recinto. Somos conscientes de que PSA está ajustando mucho los costes logísticos. Por eso defendemos que lo que se aumente en los costos generales de la operación no debe repercutir en Citroën. ¿Quién lo tienen que asumir? Los que están en el medio, y donde nosotros creemos que hay un sobrecoste. Y tienen que hacer ese esfuerzo. Proponemos una subida pequeñísima, de cinco a siete céntimos, 60.000 euros más al año, que desde luego no cubre el déficit. ¿Y qué pasa cuando tienes un déficit? Pues que hay unas partes del puerto que subvencionan a otras. Nos encontramos con que la terminal de contenedores da beneficios, y es la que aguanta el puerto de Vigo. Así que hay que ser justos.
- Como en Ro-Ro, en la terminal de contenedores también temen a las consecuencias de retirar a la estiba tareas exclusivas.
- Bueno, a mí el comité de empresa de la Sagep me parece una gente razonable. Lo primero que deben hacer es como ahora, sentarse a hablar seriamente. Quiero decir que esto se va a liberalizar. Sé que la Sagep está en la posición de mantenerse en un mercado liberalizado. Porque tiene el personal cualificado. Pero si son listos y hay una mínima flexibilidad. Si no son inteligentes surgirán otras empresas que les quitará el trabajo. Así que miedo a qué, ¿a cumplir la ley?
-Miedo a que esa mercancía tan valiosa que mueven dentro de contenedores o los vehículos sufran bloqueos.
-¿Hacer una huelga por ir contra los términos de una ley? Es que no me entra en la cabeza. ¿Que se haga una huelga con el objetivo de vulnerar la legislación? Eso es imposible, y legalmente, muy cuestionable.
- Pero la posibilidad existe.
- Yo no tengo miedo a una huelga, desde luego. Nunca lo tuve y no lo voy a tener ahora a mis años.
- ¿Tampoco está preocupada la planta de Balaídos?
- Preocupada lógicamente está pero es consciente que el dejar ir las cosas por no hacer frente a los problemas no es buena receta.
- Otras aguas que ha revuelto es el "tapón" del PIF. A la rigidez de los inspectores de Guixar, además del desvío de carga seca a Marín por parte de Maersk, atribuye la tendencia negativa del tráfico de mercancías de los últimos meses. ¿Todo se debe el celo de los funcionarios o al sistema en general?
- Lo voy a decir de la manera más suave. Aquí hay actitudes personales que dificultan muchísimo la agilidad del Puerto. Y he sido testigo directo en mi propio despacho del conflicto entre Sanidad Exterior y Sanidad Vegetal. Y me pareció vergonzoso que unos no se quisieran sentar con otros. Y con eso queda todo dicho. La administración tiene que ser ágil y proporcionada. Y lo vamos a documentar a través del estudio que vamos a hacer. ¿Qué si hay desvíos por esta razón? ¿Empresa que no introducen sus mercancías por Vigo sino por Leixões? Sí y sí. ¿Me autorizan a dar sus nombres? No, porque me dicen que temen represalias. Y esto en democracia es intolerable. Ahora tengo que ser cuidadoso porque espero que se resuelva. Y de una forma racional.
"Que conozca al alcalde desde hace años puede que me haya facilitado mucho las cosas"
- -¿Si no fuera por su buena relación con Caballero cree que se hubiesen desbloqueado las obras paradas en las naves de O Berbés o la del Comercio?- La circunstancia personal de que el alcalde y yo nos conocemos hace años puede que sí, que me haya facilitado mucho las cosas. No sé si en estos dos proyectos en concreto, pero lo importante es que se desbloquearon.- De la planificación del "Crecimiento Azul" (Blue Growth) emanará el Plan Director de Infraestructuras del Puerto. Una vieja propuesta del Concello pasa por prolongar el túnel de Beiramar hasta Barreras para humanizar la superficie de Beiramar. ¿Es irrenunciable esta avenida?- El problema es que el trazado del túnel tropieza con sistema de servicios como canalizaciones y sería costosísimo. A corto plazo no lo veo prioritario, pero estamos abiertos a estudiarlo.- ¿Cree que Elena Muñoz tiene asegurada la presidencia del PP local frente a alternativas como la de Javier Guerra?-Elena es la persona más adecuada, por carácter, edad, preparación y por dedicación. Es la portavoz del municipio y tiene una perspectiva vital larga; es una apuesta a largo plazo. Respecto a otras alternativas implicarían una bicefalia y yo no creo en las bicefalias. La portavoz municipal tiene que presidir también el partido. Por muchas razones, entre ellas, la dedicación. Elena se dedica al 100% a esto. Otras alternativas, pues?. Primero hay que vivir en la ciudad o cerca y estar dispuesto a trabajar los fines de semana. No se puede decir eso de que yo no trabajo los fines de semana porque los tengo libres. Mi apuesta está clara: Muñoz.
