La presidenta de la Diputación, Carmela Silva, reiteró ayer su "compromiso absoluto" con la puesta en marcha del Área Metropolitana y su voluntad de "sentarse" a negociar el traspaso de competencias y recursos. Eso sí, señala que será el propio Área el que defina las labores que quiera desarrollar, después de que se constituya. "Todo lo que plantee el Área, lo facilitaremos", aseguró.

Por otra parte, se mostró partidaria de reformar las diputaciones "para que haya un procedimiento claro para garantizar la equidad". En cuanto a eliminarlas, se abre a debatirlo, pero advierte que son imprescindibles "estructuras intermedias" entre las comunidades y los concellos pequeños para garantizar la prestación de servicios.