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Las trabas administrativas en Guixar a la pesca congelada

Argentina avisa que "ningún puerto del mundo" rechaza los certificados vetados en Vigo

La responsable de Sanidad Exterior del PIF vigués insiste en rechazarlos. Insta "a resolver el problema"

La mayoría de la exportación parte hacia Guixar, y ahora también, Leixões | El envío de mercancías desde Puerto Deseado a Vigo "es muy intenso", valoran los inspectores de esta terminal, ubicada en la región más austral de América. Aquí descarga buena parte de la flota de armadores vigueses -como la de la imagen, de Vieira- desplegada en caladeros de este país o próximos como Malvinas. "La mayoría de los contenedores que salen de acá van para Vigo", confirman desde el Senasa. Pero en el último año también aumentó la salida de pesca congelada hacia Leixões (Portugal). "Aunque en pasaje transitario", matizan los inspectores tras revelar que su destino eran empresas del área viguesa.

A 14.000 kilómetros de distancia de Vigo, un grupo de funcionarios asiste perplejo al revuelo que por discrepancias con sus certificaciones están provocando sus colegas españoles entre el empresariado de su ciudad. Desde el Centro Regional de la Patagonia Sur del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) -con sede en Puerto Deseado- han manifestado a este periódico que "ningún otro puerto del mundo" hacia donde exportan mercancías perecederas, principalmente del continente europeo y asiático, ha puesto inconvenientes a la documentación visada por esta institución sanitaria. "Sólo en Vigo se quejan de nuestras certificaciones", coincidieron en afirmar empleados del Senasa a propósito del conflicto surgido la semana pasada al bloquearse en el PIF de Guixar la descarga de nueve contenedores con langostino austral con el argumento de que los documentos expedidos en la Patagonia eran "ilegibles".

Cuando FARO contactó esta semana con el Senasa en Puerto Deseado, sus inspectores todavía seguían asombrados de que en Vigo se justificase el rechazo de contenedores cargados de pesca congelada basándose en una cuestión como la de la tinta, en apariencia, fácil de solventar en la era de la globalización. Pero ese día creían que el puntilloso asunto ya entraba en "vías de solución". También lo esperaban los importadores vigueses, hasta que el pasado jueves recibieron una circular de Ana Martínez. La responsable de Sanidad Exterior en Vigo les comunicó en ese correo electrónico la conclusión a la que llegó "tras muchos certificados revisados y muchas indagaciones". Ahora el fallo no está en la tinta, sino que, dice, es "un problema de compatibilidad entre la impresora y el papel utilizado". Y lanza un reproche al Senasa: "Tengo que reconocer que no ha sido de ninguna ayuda en la resolución del problema".

Hasta hace pocos meses, las mercancías validadas por las autoridades sanitarias de Puerto Deseado con destino Vigo -principalmente contenedores con pesca congelada-, "por lo general llegaban sin problemas" a Guixar, según los inspectores argentinos. Desconocen si con anterioridad las empresas sufrieron otros inconvenientes de los que no fueron informados, pero los vinculados a la impresión de los documentos "surgieron antes de verano", constataron.

El asunto, en "altas esferas"

Desde el principio, el Senasa se mostró dispuesto a arreglar este entuerto, como reveló en una carta enviada a los importadores vigueses, aunque, tras varios cambios, ya descartaba que fuera a reformular otra vez los documentos. Uno de sus inspectores jefes, Juan Ramiro Vilches, alegaba que "por orden de la superioridad de la Dirección de Tráfico Internacional no emitirá más cambios por este problema, dado que los certificados se entregan legibles y no poseen ninguna alteración en su tinta". Ahora, en cambio, la polémica ha alcanzado tal repercusión que como reconocía esta semana desde en su mismo departamento, "están tratando de resolver el asunto las más altas esferas del organismo. Coordinadores, subdirectores y cancillería".

A instancias superiores también se dirigió la responsable de Sanidad Exterior en Vigo exponiéndole el resultado de sus indagaciones. En la circular remitida a las empresas viguesas este jueves encabezada con el asunto"Certificados con tinta no indeleble de Argentina" , Ana Martínez precisa que estos "no son impresos por la autoridad, son las propias empresas las que los imprimen y se lo llevan a firmar a Senasa". Aquí radica el meollo de la cuestión, sostiene esta funcionaria, que se extiende en sus conclusiones: "Hay multitud de impresoras y no todas son compatibles con el papel oficial, de ahí la diversidad de situaciones que nos han aparecido respecto a la estabilidad de la impresión". Así que avanza a los destinatarios que ha comunicado el resultado de su investigación "a la Subdirección para que inste a Argentina a actuar ante este problema, que es más fácil de abordar a mi juicio". A modo de despedida, desea "con todas mis fuerzas que esto no vuelva a pasar", y tras lamentar la escasa colaboración del Senasa -"no ha sido de ninguna ayuda"-, emplaza a las empresas a "resolver el problema".

Diez contenedores inmovilizados cuestan 1.000 euros al día

  • El "Informe de seguimiento Blue Growth: Benchmarking de trámites administrativos vinculados al PIF" abordado este viernes por el Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria abunda en el perjuicio que ocasiona el "excesivo celo mostrado por ciertos funcionarios en las inspecciones", lo que ya genera el desvío al puerto portugués de Leixões del orden de 50.000 toneladas al año sólo de pesca congelada.Este análisis califica como "eslabón clave para el buen funcionamiento de la cadena logística" en un puerto como el de Vigo, "uno de los principales centros de transformación de productos de la pesca del mundo y ciertamente el número uno de la Unión Europea", que haya una "rápida y coordinada tramitación de las mercancías por los servicios aduaneros y paraduaneros". Y en Guixar sucede todo lo contrario.Algunos empresarios renunciaron a importar determinados productos por Vigo y optaron por Leixões para no sufrir "acoso" del personal del PIF de Guixar. El caso de la "tinta indeleble" en los certificados del Senasa argentino "no es aislado". El Puerto cita situaciones que "rozan lo estridente". Como "certificados de reemplazo que son denegados porque existen casillas en el documento que no pueden subsanarse; solicitud de un certificado de reemplazo porque ha existido una equivocación entre dos establecimientos autorizados de un operador habitual...". Trabas que "se saldan con días de espera de los contenedores en la terminal, incrementando los costes de los importadores, y transmitiendo una imagen de falta de fiabilidad del Puerto de Vigo".Para el importador, el gasto por la inmovilización o paralización de mercancías no es poco. El informe lo ejemplifica con una partida de 10 contenedores. Cada día retenidos "aumenta el coste en 1.000 euros", afirma, por lo que a los 10 días, el monto de la tramitación ascendería a 10.000 euros. Y si al final se rechaza la mercancía y debe reexpedirse hacia su puerto de origen, como Argentina, la factura se situaría en 20.000 euros por contenedor. En total podría perder 200.000 euros.

Los importadores afectados valoraron Marín como alternativa

  • La situación desesperante que viven las empresas importadoras por el "exceso de celo" del PIF de Vigo les llevó a buscar puertos alternativos por donde introducir sus mercancías. Leixões es todavía la primera opción, y desde la Autoridad Portuaria de Vigo admiten que ese descenso del 10,5% en la pesca congelada hasta agosto pudo fugarse hacia la terminal lusa. Aunque antes de verano, coincidiendo con otro episodio del tapón burocrático en Guixar, en Puerto Deseado se plantearon enviar los contenedores a terminales aún más próximas a Vigo. Y surgió entre las posibles, Marín.Según confirmaron operadores vigueses, la opción marinense se descartó por "falta de líneas", conexiones marítimas que como en Vigo permitiesen transportar esa mercancía desde la Patagonia. "Todo se andará. Maersk está allí. Marín se llevó la fruta y los eólicos también. Pues ahora podría ir a por la pesca congelada. ¿Por qué no", alertan.

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