Los consejeros del Puerto debatieron también ayer, en detalle y con estupor, las trabas administrativas que padecen las empresas importadoras de productos perecederos. El bloqueo de los funcionarios del Puesto de Inspección Fronteriza (PIF) a contenedores con langostino austral al rechazar los certificados de las autoridades argentinas por "tinta ilegible" desató la semana pasada la indignación de la comunidad portuaria. Tras exponer las claves de esta problemática, Enrique López Veiga recibió el apoyo unánime del Consejo para acabar con una "vieja situación" que achaca a "caprichos y majaderías de ciertos funcionarios". Sin aludirla, en el centro de la diana de las críticas del presidente, compartida por un sinfín de empresas afectadas, está la responsable de Sanidad Exterior en Vigo, Ana Martínez.

Por los problemas que padecen las empresas en el PIF, Leixões capta mercancías con destino final Vigo (solo en pescado congelada, 50.000 toneladas al año). Productos que tras descargarse en el puerto luso llega a las empresas de la ciudad por carretera. El análisis de esta logística antinatura figuraba entre las acciones de la nueva estrategia portuaria Blue Growth. Este informe sobre el impacto por los inconvenientes del PIF de Guixar aún está incompleto pero el Puerto tiene muy claro el problema. "Un exceso de celo clarísimo de determinados funcionarios", dijo López Veiga.

Desde que tomó posesión de la presidencia del Puerto "no he tenido más que quejas de las arbitrariedades en el PIF por parte de determinados servicios", recordó. "Y de otras no me constan en ningún documento, pero las he vivido en persona", reveló.

Entre las mercancías que ya arrebató Leixões por el tapón administrativo en Vigo, Veiga citó las "colas de rape y la fruta de Sudáfrica". Y no por dudosa diligencia de este puerto o porque haga la vista gorda. "Los inspectores de Leixões tienen un comportamiento administrativo de personas normales. Aquí no", aseveró. Como ejemplo citó el "bufo" episodio de la tinta argentina. "Resulta intolerable e infumable. Sé que es muy difícil remover a un funcionario cuando tiene exceso de celo o hace estas majaderías, porque no son más que majaderías. Y un funcionario de categoría media no puede arriesgar unas relaciones internacionales. Al final provocará que intervenga hasta el ministerio de Exteriores", zanjó.

Encuesta entre los afectados

Consciente del "miedo" entre los afectados "a represalias de los funcionarios del PIF", encargó un estudio entre todos garantizándoles el anonimato. Busca concretar ese compendio de razones que alegan los inspectores en los rechazos a los contenedores y calibrar el impacto en la actividad portuaria. En todo caso recalcó que "los ciudadanos tienen derecho a defenderse de las arbitrariedades de la función pública. La coacción está penada", apostilló. Este asunto enoja y mucho a López Veiga. Su embestida contra "ciertos inspectores" no pudo ser más incisiva: "No se puede ser señor de horca y cuchillo usando ese privilegio de que un funcionario es inamovible. Aunque parezca que a los funcionarios no se les puede echar, es mentira", zanjó.