El Gobierno gallego asume la construcción de la nueva Facultad de Medicina en terrenos anexos al Hospital Clínico Universitario de Santiago (CHUS) que actualmente se utilizan como aparcamiento en superficie. El Consello de la Xunta dio luz verde ayer a un convenio con la universidad compostelana de carácter supramunicipal al entender que el centro es el único de la comunidad que oferta estos estudios y, por tanto, las condiciones en las que se imparte docencia afectan a todos los alumnos gallegos que cursan actualmente la carrera o que pueden matricularse en el futuro.

El coste de la nueva facultad todavía está por determinar, pero la Xunta aportaría previsiblemente el 85% de la financiación necesaria. La Universidad de Santiago, que afrontaría el 15% restante, ya ha convocado un concurso de ideas financiado con 60.500 euros por la Consellería de Sanidade.

El protocolo también determina que la institución académica cederá de manera gratuita las actuales dependencias de Medicina de la calle San Francisco al Gobierno gallego, que las utilizará con fines institucionales durante un periodo de 75 años.

La nueva facultad estará situada al lado de las instalaciones donde actualmente se imparten las clases prácticas a los alumnos de 6º y dará respuesta a las "necesidades más urgentes de la titulación".

El acuerdo contempla además una segunda fase que implicaría al hospital Gil Casares, situado frente al CHUS. Este inmueble pasaría a albergar más dependencias de la titulación de Medicina, así como de Odontología y Enfermería. El coste de esta operación también sería asumido de forma compartida por la Xunta y la Universidad de Santiago.

El traslado implicará asimismo la mudanza de las unidades y los servicios asistenciales que actualmente presta el Gil Casares a las instalaciones del CHUS, lo que requerirá de una ampliación que será financiada por el Sergas, que también establecerá el calendario para la ejecución de estas actuaciones.

Desde la Xunta sostienen que el carácter supramunicipal del protocolo, que se articulará mediante un plan sectorial, también se justifica por el hecho de que las infraestructuras sanitarias prestan servicio a la población de otros municipios gallegos, no solo al de Santiago.

La Consellería de Cultura, Educación y Ordenación Universitaria asume el compromiso de iniciar los trámites para disponer de los instrumentos jurídicos necesarios para que la Xunta financie la nueva Facultad de Medicina.

Y Facenda, por su parte, gestionará con la Tesorería General de la Seguridad Social el mantenimiento de la cesión de la parcela del hospital Gil Casares, actualmente de su titularidad, para los nuevos usos docentes y asistenciales.