El convenio sobre La Panificadora establece la cesión al Concello de los diez singulares silos, una de las señas de identidad de la factoría y que ya forman parte del paisaje urbano de la ciudad. Caballero apuntó ayer que los silos son "intocables" y su propuesta pasa por "conservar una parte adicional" del antiguo complejo fabril, que en su época -abrió sus puertas en 1924- fue el más moderno de España en su sector.

"Hay piezas que sería bueno utilizar para otros fines por su notable valor artístico, histórico y arquitectónico", comentó Caballero. La Panificadora fue diseñada por Gómez Román con la participación de los ingenieros Otto Werner, Jorge Buchl y Carlos Kohl, y ya en 1930 se acometió una primera ampliación ante el aumento de la producción de pan. En las décadas siguientes se acometerían otras. La fábrica creada por el empresario Antonio Valcarce cerró en 1981. La parte que se mantendría estaría aún por definir y dependería del estudio de los técnicos.

Caballero asegura que es posible iniciar los pasos "de inmediato" para poner en marcha el proyecto. La aprobación en el pleno de Zona Franca sería el primero de ellos, y paralelamente el alcalde pide la incorporación al próximo presupuesto del Consorcio de una partida para iniciar los trámites, "aunque sea simbólica".

El regidor descartó convocar por ahora el pleno para tratar las cuentas del Consorcio.