Peinador volverá a tener a partir de otoño la peor oferta de vuelos a Barcelona del Noroeste y una de las más pobres de España. Y Vueling tendrá bastante que ver. La low cost ha cargado ya su programación para la temporada aeronáutica de invierno (de finales de octubre a finales de marzo) y lejos de mejorar la conexión -como sí hizo en primavera y verano tras la llegada de Ryanair a la terminal olívica- la mantendrá bajo mínimos llegando a suprimir el único avión que tiene los sábados en cada sentido. A excepción del 24 y 31 de diciembre, el resto, no lo operará.

Pero las limitaciones de su programación en Peinador van más allá, especialmente si se compara con la que tendrá en A Coruña, donde recibe subvención de su Concello; o Santiago, donde al menos durante varios años tuvo apoyo de la Xunta y posteriormente de su gobierno local sin que ahora se haya aclarado -al menos públicamente- si sigue recibiendo algún tipo de ayuda. Mientras que en Peinador, donde no recibe dinero público alguno, tendrá una media de 8 despegues y otros tantos aterrizajes cada semana (2.880 plazas) en Alvedro los multiplica por dos hasta llegar a 16 (5.760 plazas). Su oferta en Lavacolla será menor que en la pista herculina, pero muy superior a la de Vigo: 13 frecuencias (4.680 plazas). En el otro aeropuerto del Noroeste, Asturias, tendrá la misma oferta de aviones a la semana que en Alvedro. Al contrario que en el de Vigo, en estos tres aeropuertos sí mantendrá al menos una frecuencia los sábados.

Pero Vueling no solo volverá a dejar en la ciudad olívica una de sus ofertas más exiguas en lo que a días de operación y plazas se refiere. También tendrá horarios de operación poco competitivos, o al menos para el interés de los vigueses y particularmente del tejido económico de la ciudad. Ir y volver en el día será imposible martes, miércoles, jueves y domingos (además del sábado, que no hay vuelo). En esas jornadas solo operará un avión en cada sentido. Solo los lunes y viernes tendrá dos con salida a las 9.50 y aterrizaje en Barcelona a las 11.30 horas; y otro que partirá de Peinador a las 20.40 horas el primer día de la semana y a las 22.25 h., el quinto.

Pero las dificultades horarias van todavía más allá. Mientras en A Coruña, por ejemplo, tiene un avión a primera hora de la mañana todos los días (6.50 horas), lo que permite llegar a tiempo a la Ciudad Condal tanto para poder realizar una jornada laboral completa y regresar en su último avión (hay días que tiene hasta tres) o también tomar decenas de conexiones aéreas a primera hora hacia otras ciudades, en Vigo no solo será imposible los días que tiene avión por la mañana por su horario tan tardío, sino que los miércoles, jueves y domingos, cuando solo tendrá una aeronave, ésta despegará entre las ocho y las nueve de la noche.

Competencia

Esta situación no es nueva en Peinador. Fue empeorando año a año tras la quiebra de Spanair. La ruta quedó entonces en exclusiva en manos de Vueling que, en lugar de introducir mejoras y ampliar el número de vuelos, los fue reduciendo de forma paulatina. Fue precisamente esta situación la que llevó al Concello de Vigo a convocar un concurso público para reforzar una ruta que se considera "estratégica" para la ciudad. Fue el que ganó Ryanair, que cubre el Vigo-Barcelona desde el pasado mes de enero con un avión diario en cada sentido (189 plazas). Y aunque la llega de la low cost irlandesa ha supuesto un revulsivo en el número de plazas y será una de las patas más importantes que permitirá este año a Peinador regresar a la órbita del millón de viajeros anual, el problema operativo no ha quedado resuelto. Y es que tampoco con Ryanair es posible ir y regresar en el mismo día al tener sólo una nave en cada sentido; pero tampoco se puede llegar a Barcelona a primera hora de la mañana, ya que su avión sale de Vigo pasadas las cuatro de la tarde.

La llegada de Ryanair también contribuyó a que Vueling rebajara de forma muy importante sus tarifas en su ruta Vigo-Barcelona para poder competir con ella. Pero también permitió que mejorara ligeramente su oferta en verano. Sin embargo, en los cinco meses de la temporada de invierno parece que no moverá ficha en positivo.