"Seremos argentinos pero tras nuestro paso por este festival nos hemos vuelto un poco serbios, colombianos, zaragozanos e incluso vigueses. Descubrir que realmente todos somos iguales, que nos mueve nuestra identidad es lo que más valoras de estos encuentros". A pesar de llevar más de veinte años subida a escenarios, María Elena Carvajal, directora del grupo Sol Argentino no podía disimular los nervios propios de un desfile. "Estás representando a tu país, si no les gusta lo que haces, siempre guardarán esa espina, esto es lo que peor llevo. Lo mejor, conocer a gente y grupos tan heterogéneos; nos llevamos un pedacito de cada uno", señala la celeste.

Y es que su recorrido junto al grupo serbio Prnjavor, el colombiano FAMA y el zaragozano La Fiera por la céntrica García Barbón supuso el broche de oro a una semana de actuaciones y eventos por diferentes barrios olívicos. El Festival Folclórico Internacional puso ayer punto y final a su XXII edición con el tradicional desfile por las calles de la ciudad, seguido por un nutrido público que no dudó en retratar e inmortalizar cada paso y cada detalle de los populares bailes.

Danzas que apelan a la épica

"La Chicha" fue el representado por el combinado colombiano. Una mezcla de danza y cumbia propia de la región de Boyacá. "Hace ya muchos años, los indígenas y campesinos de la zona se reunían en el mercado y preparaban la chicha, vasos construidos artesanalmente en los que luego se servía una bebida a base de la fermentación del trigo. Luego se ponían el vaso en la cabeza y el que menos aguantase, pagaba la ronda de todo el mundo. Es un baile relacionado con la fiesta, la diversión, la victoria, y por ello lo hemos escogido", explica Freddy Moreno, director de FAMA (Figura, Arte y Música Auténtica) Colombiana.

Tanto para él como para sus 26 integrantes, este festival supuso su primera estadía en España apuntando que nunca imaginaron mejor forma de "estrenarse" que en Vigo. "Nos ha parecido una ciudad ideal. Su comida, la playa, el tiempo, sus barrios, sus gentes; nunca pensamos que pudiésemos disfrutar tanto con este festival. No esperamos que nos llamen otro año, ya nos presentamos candidatos", bromeaba Moreno.

Los vecinos de las parroquias de San Miguel de Oia, Valladares, Cabral, Baede y San Andrés de Comesaña fueron los primeros en poder disfrutar de los ritmos latinos y europeos de estos cuatro grupos folclóricos. Y es esta mezcla la que aporta valor, carácter y cuerpo al festival. "Son impresionantes los cuatro y por ello el público y la gente se ha involucrado tanto", resaltaba Roberto Giráldez, uno de los organizadores. No solo encima de un escenario o a lo largo de la arteria del centro vigués discurrieron los espectáculos del cuarteto: todas las mañanas animaron a aquellos visitantes que escogieron el bus turístico como medio para conocer la ciudad y animaron a los comerciantes y vecinos de Calvario, Teis, Coia y Porta do Sol con improvisados números.

Vigo no fue la única parada gallega de la banda serbia Prnjavor. Antes de recalar en tierras olívicas, visitaron Narón. "Es nuestra primera experiencia en Galicia y sin duda podemos decir que lo hemos pasado increíble. Volveríamos a repetir sin duda", resalta Katarina, traductora del grupo, quien reconoce estar "asombrada" con la calidad y formas artísticas de los demás grupos. "No conocía a ninguno pero nos hemos quedado asombrados ante su espectáculo. Te llevas mucho más que una actuación o una visita", comenta la intérprete serbia.

El Teatro Afundación acogió la puesta en escena final. María Elena Carvajal, de Sol Argentino, recordaba con mucho cariño sus actuaciones anteriores. "Ya habíamos estado aquí dos veces más y el trato siempre es fantástico. El público sabe reconocer y valorar tu trabajo y eso es de agradecer. Para nosotros esto no es un hobby, es nuestra vocación", apuntó la porteña, quien resaltó que lo verdaderamente importante de este festival no es "la música, el baile o lo que hay en el escenario, sino lo que no se ve. La convivencia, el saber estar... podemos ser de diferentes etnias sin embargo todos tenemos el mismo objetivo que es representar y dar a conocer nuestro país, por ello nos compenetramos tan bien", señaló Carvajal.

Además del espectáculo del movimiento, el vestuario es otro de los puntos fuertes del desfile. Las notas de color, ponchos y vallenatas, nombre con el que son conocidos los sombreros en Colombia, también fueron protagonistas del desfile. Aunque este festival tocase a su fin, Vigo, continúa como capital del folclore al celebrarse hoy en Coruxo un evento con música tradicional de Hawai, África, Uruguay y Galicia.