La familias de Teis y Chapela que soportan el denso tráfico en la entrada a Vigo de la AP-9 han encontrado un aliado en el Ministerio de Fomento. El departamento que dirige Ana Pastor ha instado a la concesionaria a colocar en este tramo elementos para reducir el excesivo ruido que sufren a diario los vecinos. Las medidas que tendrá que adoptar Audasa consisten en la instalación de pantallas acústicas y la aplicación de un firme absorbente que reduzca el impacto sonoro. El proyecto original de la ampliación de los accesos a la autopista no recogía ningún reductor acústico en estos kilómetros, pero a instancias de Fomento, la empresa lo modificó para incluirlos aprovechando las obras en marcha.
Los vecinos de Teis y Chapela que viven cerca de los accesos a la AP-9 a Vigo llevan más de tres décadas esperando a que Audasa adopte las medidas instadas ahora por Fomento. "Audasa debe actuar ya", zanja el secretario de la Asociación Veciñal de Teis, Anxo Iglesias, quien considera "incomprensible" que la concesionaria no haya adoptado ninguna medida para atajar el ruido a pesar de tener informes sobre la mesa, desde hace años, que revelan la "gravedad" del problema.
Según un "mapa del ruido" elaborado en 2012 el tramo de apenas 3,8 kilómetros de la AP-9 que transcurre por Teis es el "más expuesto" a contaminación acústica de toda la Autopista del Atlántico, que suma 219,6 kilómetros entre Ferrol y Tui. Los técnicos que elaboraron dicho informe concluyen que en la franja viguesa hay 5.000 viviendas y 13.500 vecinos que soportan más de 55 decibelios (dB) a raíz del denso tráfico del vial. A ellos se sumarían las cerca de 200 viviendas y 1.100 personas que conviven con niveles de ruido que exceden los 65 dB en Chapela, según un informe encargado por la Asociación de Afectados por la Ampliación de la AP-9 Rande-Teis. Francisco Puch, portavoz de este último colectivo, se muestra también muy crítico con Audasa: "Es lamentable que a estas alturas aún no se haya actuado".
Puch recuerda que el tramo lleva en marcha desde 1981, cuando se abrió el trayecto Vigo-Pontevedra, por lo que el problema se conoce desde hace 35 años. A pesar de ello critica que la concesionaria nunca se plantease una solución. "El ruido afecta a un centro de educación, a una iglesia, a un centro de salud y a viviendas", lamenta el portavoz de la Asociación de Afectados por la Ampliación de la AP-9. En este sentido avisa que la ampliación del vial "agravará todavía más el problema", por lo que reclama una "intervención inmediata".
A finales de la semana pasada el alcalde de Redondela, Javier Bas, revelaba el compromiso de Audasa de estudiar y aplicar medidas para evitar esa molestia a los residentes del entorno, sin embargo Puch coincide en la necesidad de ir más allá en las mejoras. "El mantenimiento muchas veces es nulo; los taludes, por ejemplo, no se limpian con la frecuencia que se debería", comenta antes de contraponer esa situación con el elevado precio del peaje de Rande. "Debería eliminarse", zanja. Otra reclamación de los afectados de Chapela es construir un nuevo acceso que evite a los conductores que quieran ir a la parroquia tener que continuar hasta Buenos Aires, en Teis, para luego volver hacia atrás.
Desde la Asociación Veciñal de Teis también reconocen la gravedad del problema, dado el elevado número de viviendas y población a la que afecta. Sin conocer la iniciativa del Ministerio de Fomento, Iglesias ya se planteaba dirigirse a Audasa para reclamarle que "actúe". "Que en todos estos años no se haya hecho nada es grave e incomprensible", abunda Iglesias. Como recuerda, en otros puntos de España o incluso en la vecina Portugal es frecuente ver barreras acústicas en los tramos de autopistas o autovías que transcurren cerca de viviendas.
Un tramo "integrador"
Al igual que Puch, el portavoz de los vecinos de Teis va más allá en su planteamiento y reclama también una mejora del tramo para "que se integre" en Teis. Propone además entradas y salidas que mejoren la conexión de ese acceso con el casco urbano, un planteamiento que ya lanzó la semana pasada a Audasa el alcalde de Vigo, Abel Caballero. En declaraciones a FARO, el regidor anotaba la necesidad de acometer una mejora en profundidad del tramo de la AP-9.
El grave problema de contaminación acústica que padecen las casas y edificios situados cerca de la AP-9 en Teis y Chapela se agrava por el denso tráfico que registra el vial. Los datos recabados por los técnicos revelan que en 2012 la intensidad media de vehículos era de 52.000 diarios. De ellos unos 3.200 eran además camiones, que producen al circular un estruendo mucho mayor que el que generan los turismos. Los datos oficiales de Audasa revelan que, tras sufrir una caída de afluencia a raíz de la crisis, el volumen de tráfico vuelve a ser en la actualidad similar al de hace cuatro años. Según los médicos especialistas estar expuesto de forma permanente a niveles que superan los 65 dB puede generar daños en la audición.
