La cuarta naviera del mundo en el transporte de contenedores elige Vigo. La alemana Hapag-Lloyd comenzará el próximo martes una ruta inédita hasta ahora en la terminal olívica que la unirá cada semana con Canadá. Esta nueva escala surge como consecuencia de la huelga de los estibadores de Lisboa que desde hace un mes mantienen parcialmente bloqueado el puerto de la capital portuguesa. Aquí atracaban los buques de Hapag asignados a la línea denominada Mediterranean Canada Service (MCA) que a partir del día 24 zarparán de Guixar para arribar ocho días después a Montreal.
Representantes de Hapag-Lloyd ya contactaron con operadores portuarios vigueses para explicarles el cambio en la estructura de escalas del citado servicio. En paralelo enviaron comunicado oficial de la naviera donde esta justifica la decisión de desviarlo a Vigo para ofrecer a sus clientes "una cobertura alternativa y segura" para sus mercancías. En esta misma circular detalla que el primer buque que atracará en Guixar el martes 24 de mayo será el Livorno Express. Consignado por Marítima Consiflet, tiene 228 metros de eslora por 37 de manga y una capacidad estimada en 2.800 contenedores.
Este buque y otros tres de similares dimensiones, Mississauga Express, Barcelona Express y Detroit Express se encargarán de cubrir el servicio de MCA para garantizar una escala semanal en Guixar. Los cuatro realizarán el siguiente itinerario: Montreal, Tánger, Valencia, Cagliari, Salerno, Leghorn, Génova, Fos, Algeciras, Vigo, Montreal. Al situarlo como el último europeo de la ruta antes de cruzar el Atlántico, la escala en el puerto vigués está enfocada a la exportación.
Operadores consultados por este periódico aseguran que la conexión que estrena Hapap-Lloyd en Vigo "resulta muy interesante" e insisten en la conveniencia de "esforzarse" en su comercialización para que se mantenga de forma definitiva. Sobre sus potenciales clientes precisan que al margen de las empresas radicadas en el área de Vigo, el abanico de la demanda del servicio MCA podría ampliarse a todo el noroeste peninsular, ya que en estos momentos en ningún otro puerto en la órbita de la competencia de Vigo, ni siquiera el portugués de Leixões, permite colocar un contenedor en ocho días en Canadá.
Además del corto tiempo de tránsito, otra de las ventajas de este servicio apuntada por los operadores es que al cubrirlo el mismo buque permite ajustar al máximo los costes al prescindir del transbordo desde otro barco más pequeño (feeder). A este aliciente económico suman la potente red de comunicaciones del puerto canadiense, sobre todo ferroviaria, que enlaza con toda la zona noreste de Estados Unidos.
El planteamiento inicial de la compañía no indica durante cuánto tiempo funcionará la escala en Vigo. La programación que divulga en su web incluye paradas al menos hasta el 14 de junio. Sobre estas fechas se sitúa el final de la huelga que el Sindicato de Estibadores de Lisboa inició el pasado 20 de abril. Protestan contra la liberalización del servicio que prestan en este puerto en régimen de pseudomonopolio, como ocurre en Vigo y otros puertos españoles, y que por una sentencia europea está condenado a desaparecer. Sus paros ya han bloqueado la descarga de 5.000 contenedores en la terminal lisboeta.
