El Álvaro Cunqueiro es uno de los cuatro hospitales españoles elegidos para participar en un proyecto pionero para el control de los fármacos en aquellos pacientes polimedicados que regresan a sus hogares tras un ingreso para evitar errores. Los farmacéuticos del hospital, los de los centros de salud y los de las boticas del área que se inscriban en este piloto, colaborarán para detectar discrepancias entre la medicación habitual que tomaba cada enfermo y la prescrita en ese momento.
Esta iniciativa -"Conciliación de la medicación al alta hospitalaria en farmacia comunitaria"- está promovida por el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos y han sido seleccionados para probarla el Hospital Universitario de Salamanca, el Virgen de las Nieves de Granada y el San Agustín de Avilés, además del Cunqueiro.
Los enfermos son más vulnerables a los errores en la medicación cuando pasa a manos de otro sanitario, por ejemplo, con el cambio de especialista o el traslado a un centro sociosanitario. Las equivocaciones que comportan un mayor riesgo para el paciente son aquellas que se cometen en el alta hospitalaria. El proyecto piloto se centra en este punto.
La conciliación de la medicación consiste en un proceso formal y estandarizado por el que los farmacéuticos obtienen una lista completa de los fármacos que consumía el paciente antes del ingreso -incluidos datos de las dosis y frecuencia de administración-, ya sean con prescripción o sin prescripción, para compararla con la que le dan al mandarlo para casa. Así se podrán detectar las discrepancias. Si las hay, comunicarlas al farmacéutico del hospital o al del centro de salud del usuario para poder resolverlo. El objetivo es asegurar la necesidad, efectividad y seguridad del tratamiento indicado.
La presidenta del colegio pontevedrés explica que este mecanismo no solo permite identificar los posibles problemas, buscar soluciones y comunicarlas al resto de sanitarios, sino que posibilita el control de "los riesgos de incumplimiento, inefectividad o inseguridad". Los farmacéuticos comunitarios también pueden colaborar con los del hospital en el momento del ingreso facilitándoles la lista de los medicamentos que usa. Para todo ello, elaborarán protocolos de colaboración y mejorarán los mecanismos de comunicación.
Las farmacias que deseen participar en el proyecto deben comunicarlo al colegio provincial antes del 12 de mayo. El número de participantes es limitado y pueden optar a ello las de Vigo, Porriño, Mos Salceda, Ponteareas, Salvaterra, As Neves, Mondariz, Mondariz Balneario, A Cañiza, Arbo, Covelo, Crecente, Tui, Tomiño, A Guarda, O Rosal, Oia, Redondela, Pazos de Borbén y Fornelos.
