A pesar de llevar en su nombre la "u" de universitario, el Chuvi había perdido buena parte de esta condición en los últimos años. Las bajas en las plazas de profesor asociado de la Facultad de Medicina de la Universidad de Santiago no se cubrían y los docentes reconocidos como tal por esta institución se redujeron a 13. La Xunta ha anunciado que convocará otras nueve, que se pondrán en marcha el próximo curso. "Teníamos una "u" minúscula que empieza a hacerse mayúscula de nuevo", se congratula el doctor Alberto Fernández Villar, el jefe de Neumología, uno de los servicios a los que se dirigen las nuevas plazas de profesor.
El Chuvi ha seguido recibiendo por curso a unos 60 alumnos de sexto curso del grado de Medicina de Santiago que rotan por distintos servicios para conocer la práctica médica y la quirúrgica. Sin embargo, aquellos que se encargaban de enseñarles no solo no recibían compensación económica por el tiempo que dedicaban a ello, sino que tampoco tenían el reconocimiento curricular que tienen sus colegas en los otros dos grandes hospitales gallegos. No figuraban como profesor asociado. Algunos aparecían como "colaborador docente", pero no tiene la misma entidad para solicitar becas, competir por financiación para un estudio u optar a un cargo. "Se asumía a los alumnos entre los médicos desde la buena voluntad, pero esta tiene una fecha de caducidad", expone el doctor Cesareo Conde, jefe del Servicio de Neurocirugía.
El cumplimiento de esta "reivindicación histórica" también traerá beneficios para los estudiante. "Ganan seguro, porque antes a la persona que se encargaba de ellos no se le podían pedir cuentas", sostiene Conde.
Para Fernández Villar es el "inicio de la normalización de una situación irregular", lo que supone un "aliciente y un reto para mejorar la docencia" y así lograr que luego quieran venir "los mejores" para hacer la residencia en Vigo. Destaca como "clave" el papel del Instituto de Investigación Biomédica en esta reivindicación, ya que ha facilitado la estructura común de Sanidade y Educación para hacerlo posible. Considera que es "merecido y necesario, pero insuficiente". "hay que luchar porque todos los servicios tengan uno", resalta.
Con esta convocatoria, Psiquiatría recuperará una de las tres plazas que perdió con jubilaciones. Su jefe, José Manuel Olivares, también lo ve como una regularización de una "anomalía" y entiende que en un futuro debería ir más allá y que se pudieran cursar las asignaturas en el Chuvi desde cuarto curso. Una opinión compartida por el doctor Conde: "Queda mucho por andar, con el tiempo, habría que descentralizar la enseñanza de los últimos cursos en los tres grandes hospitales con un claustro de profesores en cada uno de ellos, dependiente de Santiago".
