No es de extrañar ver por la peatonal de Calvario, alrededores de Independencia o incluso en los bancos del interior del Concello a decenas de jóvenes absortos en sus móviles. Y es que más de 70.000 vigueses se han beneficiado a lo largo del año pasado de los servicios de wifi gratuito que proporciona el Concello.
Vista la gran acogida y utilidad que proporciona esta red, desde el Concello se ha decidido ampliar este servicio a otra instalaciones, en su mayoría lúdicas y deportivas. Así, durante el año 2016 este proyecto de wifi libre se extenderá a los centros deportivos municipales como el de Travesas, Berbés, Balaídos, piscina de Lavadores y Teis. Los museos también serán objeto de esta ampliación. Quiñones de León y Pinacoteca tendrán en su oferta cultural servicio de conexión a internet. La oficina de Turismo y Vigozoo también se beneficiarán de este nuevo servicio.
Estos nueve complejos municipales se unirán a lo largo de este año a los otros trece, distribuidos en seis barrios diferentes, que ya cumplen con esta función. Los espacios cerrados son preferencia a la hora de beneficiarse de esta conexión ya que mensualmente se conectan a él 4.315 personas, 51.780 a lo largo de todo el año. Sin embargo, los internautas también pueden navegar de forma libre por tres zonas urbanas: O Calvario, plaza de la Independencia y plaza de América.
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En total son cinco los puntos de acceso ya que en las calles Coruña y Florida también se alcanza este servicio. Un total de 21.024 personas se han conectado de alguna manera a esta red urbana pública en 2015.
Gracias a esto uno de los bancos de la calle peatonal del Calvario, el más próximo al mercado, se ha convertido en el más utilizado por los jóvenes vigueses que, día tras día, van a conectar sus dispositivos y disfrutar de las ventajas de vivir en la ciudad.
En plaza de la Independencia también hay bastante potencia de descarga sin embargo, dar con el servicio es incluso más costoso que contratar tu mismo internet mientras que en plaza América la cobertura wifi municipal se reduce al espacio entre la biblioteca de As Travesas y el Centro Comercial Camelias.
