La propuesta de AGE de "rescatar" el hospital Álvaro Cunqueiro motivó ayer un debate de alto voltaje en el Parlamento de Galicia, que terminó saldándose con la expulsión del portavoz de Alternativa, Xosé Manuel Beiras. Antes, el presidente de la cámara, Miguel Santalices, ya le había llamado al orden en varias ocasiones. Es la primera vez que el nuevo responsable de la cámara autonómica aplica esta medida.

La expulsión de Beiras se produjo casi al final del debate, después de que el diputado de Alternativa emplease su turno de réplica. Beiras se dirigió al escaño del diputado popular Miguel Tellado haciendo aspavientos y le acusó de "estar riéndose de los ciudadanos". Durante la discusión con el popular, Beiras golpeó la mesa de Tellado, lo que provocó que el presidente de la cámara decidiese expulsarlo de forma inmediata. Para ello apeló al artículo 108 del reglamento, que contempla esa medida para cualquier persona que esté promoviendo un "desorden grave con su conducta".

Según aclaran fuentes del Parlamento, la expulsión irá acompañada de la suspensión de los derechos parlamentarios de Beiras durante 15 días. En la práctica eso supone no poder asistir a ninguna sesión ni comisión, además de estar privado del salario durante ese período.

Ya por la tarde Beiras lamentó que "es la segunda vez" que se le expulsa de la cámara. La anterior -recordó- ocurrió a mediados de 1993, con Fraga como presidente, cuando se debatía un proyecto de ley de reforma de la cámara. En aquella ocasión el ahora portavoz de AGE llevó la decisión al Constitucional, instancia que acabó dándole la razón.

"Cada vez estoy más indignado en el Parlamento, porque estamos padeciendo la reinvención de lo que yo denominé partido único por parte del PP", explicó Beiras, quien defiende que en el Parlamento "defendió en tono de raciocinio, moderado, el resultado del proceso de trabajo de muchas semanas para divulgar el proceso perverso de la concesión del nuevo hospital de Vigo". "Hay alguien que dice que es portavoz del PP y se estaba riendo... Evidentemente si uno no se indigna no sintoniza con los ciudadanos", recalcó el portavoz de AGE.

El diputado popular Javier Dorado aseguró en su cuenta de Twitter que Beiras se había dirigido a la bancada de PP con insultos como "tonto", "mamón" o "gilipollas".