- La fecha de puesta en marcha el próximo junio se sitúa poco después del plazo inconcreto que Acuaes siempre fijó de manera oficial, el de "primavera de 2016". ¿Al final cuánto retraso acumula?
- Si cumplimos el plazo de ponerla en marcha el próximo junio el retraso será de cinco meses en una obra de 40. Apenas un 10% del plazo. Y no estamos hablando de una carretera en Castilla, con todos los respetos. Sino de una macrodepuradora y un emisario submarino. Yo firmaría un retraso así en septiembre de 2012, cuando comenzaron las obras. No hay que olvidar que son obras muy problemáticas, y muy condicionadas por las circunstancias meteorológicas.
- Y una vez en marcha el sistema de depuración, ¿cuándo acabarán las obras en Coruxo?
- Que entre en funcionamiento en junio la depuradora no significa que acabe la actividad en el recinto de Coruxo. A partir de ese momento arrancaría el primer año de lo que definiría como "la explotación vigilada". El contrato de la adjudicataria incluye el primer año de explotación para hacer ajustes, para garantizar que la calidad del vertido se cumple. Es que no se trata de acabar las obras y entregarle las llaves al Ayuntamiento. Antes tiene que funcionar todo conforme lo comprometido. La gente seguirá viendo grúas allí y camiones entrando y saliendo porque se iniciarán una serie de obras secundarias, como la demolición de las instalaciones viejas que quedarán para entonces inutilizadas, la regeneración de toda esta zona de dominio público que se devuelve y la restauración ambiental de toda esa parte de la marisma del Lagares.
