Los socialistas tumbaron la moción del PP -apoyada por Marea- que pedía un informe jurídico sobre las consecuencias que puede tener la sentencia del Supremo en la prórroga del contrato con Aqualia, ya que se fundamentó en la previsión de necesidades del PXOM ahora anulado. Muñoz acusó al gobierno local de "levantar un muro de silencio sobre la concesionaria" y pidió que, si se mantiene la prórroga, se reformulen las inversiones para "hacer obras necesarias y evitar las inundaciones que dieron la vuelta a España", citando el caso de Balaídos. El segundo teniente de alcalde, David Regades, replicó que cuando el PSOE llegó al gobierno "las inversiones de Aqualia estaban a cero"; defendió la transparencia del contrato; y señaló que "las inundaciones fueron por el desbordamiento del Lagares".